La jerezana Marta Barrera está creciendo a pasos agigantados en el mundo del pádel. Con tan solo 17 años ya ocupa el puesto 54 del ranking mundial del World Padel Tour y se encuentra realmente metida en su formación, compaginando estudios con entrenamientos, para seguir haciendo frente a los diferentes campeonatos y seguir escalando posiciones. Se ha metido ya en trece cuadros finales del WPT, algo que le permite viajar por todas las partes del mundo para disfrutar de lo que más le gusta y en donde arrancó cuando tan solo tenía ocho años. Ahora, sueña con llegar a lo más alto del ranking mundial y seguir creciendo como deportista.
“Jugar en un cuadro final del World Padel Tour es muy impactante, es como que no te lo crees del todo”
¿En qué momento te encuentras ahora?
–Ha habido un parón y a finales de agosto volvemos a tener un challenger y durante este mes nos centramos, sobre todo, en preparación física y en corregir pequeñas cosas tácticas que no hayan ido bien. Nos ponemos a punto, que luego vienen una serie de torneos y no hay tiempo. Con respetco al año anterior he evolucionado sobre todo a nivel físico. Tengo un nuevo preparador y lo he notado a la hora de correr, tengo más resistencia. También influye el cómo me lo he tomado, antes era más pasota con el tema físico y ahora es más estricto.
El número 54 del ranking mundial es algo importante...
–Hace una año estaba la 150 y en un año he cambiado mucho, pero tampoco quiero dejarlo ahí y quiero ir a más.
¿Cómo está yendo la temporada?
–Empecé con una pareja que se llamaba Andreina de los Santos y en los primeros torneos, aunque no llegaron los resultados, no nos fue mal. En Alicante nos metimos en un cuadro final del World Padel Tour y fue la primera vez que lo conseguía y con ella fue con quien lo logré. Luego empecé con Marta Caparrós y me está yendo muy bien. Nos quedamos en fase previa la primera vez y luego todo han sido cuadros y octavos de final.
¿Cuál es el próximo reto que tienes por delante?
–El Challenger de Calandra, a finales de agosto. Luego tenemos Portugal, Estocolmo, Madrid, Amsterdam, Santander, Oriente Medio, Menorca, Torrent, Malmo, México y Córdoba. En principio estoy clasificada directamente para el cuadro final. Existe la pre previa, previa y luego cuadro. En pre previa empecé a principios de año, pero ahora estoy ya en cuadro. Va dependiendo de cada torneo, si pierdo el siguiente y otras jugadoras ganan bajo a previa.
¿Meterse en un cuadro final es lo que te da el verdadero empujón?
–Este año estoy sumando mucho porque cuando empiezas en el torneo solo sumas. Este año que estoy jugando todos los torneos del World Padel Tour, estoy empezando a sumar y eso se nota. Hay compañeras a las que les resta si consiguen un puesto peor que el año anterior.
¿Cuáles son las sensaciones de jugar un cuadro final del World Padel Tour?
–Al principio era como muy impactante porque eran los mejores del mundo y te ves ahí con ellos. Es verdad que nunca te lo llegas a creer del todo. Después de jugar cada torneo piensas que tendrías que haber disfrutado más porque siempre quieres más, nunca te sabe a poco.
Detrás de todo esto hay mucho entrenamiento...
–Entreno cinco días físico y pádel. Los entrenamientos de pádel son aquí en Padel Extereme y el plano físico lo realizo en San Fernando. También tenemos hora con la psicóloga que se va alternando según los torneos. Y nutrición también. Aunque más que la parte práctica y de pádel donde más se nota la difetencia es el el físico. Todas las jugadoras del WPT están con un físico súper potente y eso se nota en la pista un montón.
¿Y cómo se costea todo el tema de los viajes y la estancia durante las competiciones?
–Yo tengo un patrocinador, Wilson, que me da todo el tema de textil, calzado y palas, pero dinero y aportaciones económicas no tengo ninguna. Todos los costes de vuelo y hotel nos lo costeamos nosotros mismos. El World Padel Tour te paga la noche hotel si estás en cuadro y lo demás va a cuenta nuestra. Aprovecho y hago un gran llamamiento. Más allá de los resultados creo que tengo poca edad y me queda mucho por delante. Lo que quiero es llegar lo más alto, pero me gusta disfrutar del proceso. Necesito gente que me acompañe y que esté ayudándome en el camino. La verdad que estaría muy bien.
¿Es muy difícil encontrar patrocinadores?
–Ahora mismo tal y como están las cosas, sí. Y más en el pádel femenino.
¿Cómo empezaste en el mundo del pádel?
–Empecé cuando tenía siete u ocho años. Mi padre siempre jugaba con los amigos y yo cogía una pala y me quería meter, aunque nunca me dejaban porque era muy pequeña. Me empecé a meter poco a poco, mi padre me apuntó a las clases y me gustó. Al principio me costaba correr y todo porque no estaba en forma, pero si quería dedicarme a esto tenía que cambiar. Me puse muy tajante con las dietas y he tenido una evolución muy buena.
¿A dónde quieres llegar?
–Mi mayor objetivo es entrar entre las diez primeras del mundo y me encantaría ser la número uno, pero es muy difícil, aunque tengo mucho tiempo por delante. Ganas no van a faltar.
Compaginas estudios y entrenamientos, ¿cómo se lleva eso?
–Acabo de hacer bachillerato y este año me meto en la carrera de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Este año ha sido súper agobiante y súper complicado. Había momentos en los que mi compañera se permitía descansar o dormir una siesta y yo tenía que estudiar. Al final he tenido pocas horas para estudiar entre entrenamientos y viajes en avión. Yo quería aprobar ya para seguir hacia adelante. Se ha sacado y estoy muy satisfecha.
