Dos buques españoles con sede permanente en la Base Naval de Rota se dirigen en estos momentos a Turquía a contribuir con el resto de efectivos desplazados por la Armada Española hasta el país para realizar labores de rescate.
El portaaviones 'Juan Carlos I' y el buque de asalto anfibio 'Galicia' pusieron dirección ayer por la tarde a la zona afectada por el terremoto en Turquía desde el mar Mediterráneo, donde ambos buques se encontraban realizando maniobras. Sin volver a su sede, este lunes cambiaron de rumbo hacia el país turco con la misión de prestar ayuda a los afectados por el terremoto que azotaba el país el pasado lunes.
Alrededor de 500 miembros de Infantería de Marina y servicios médicos son los efectivos que conforman la tripulación portando además material preparado para el rescate de personas. La previsión es que ambas embarcaciones puedan servir de alojamiento provisional de los rescatados del seísmo.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha informado además de que dos aviones salieron también este lunes desde las bases de Morón, integrando a la Unidad Militar de Emergencias (UME) y Torrejón de Ardoz hacia la ciudad turca de Adana, donde se encuentra la base militar española. La idea, ha dicho Robles, es que los efectivos se pongan a trabajar “inmediatamente” una vez alcancen tierras turcas ya que, el terremoto ya ha dejado casi 2.600 fallecidos.
"Está preparado para rescate y para intentar llegar, en su caso si fuera necesario, por mar y desde allí desembarcar los infantes de marina", ha explicado Robles sobre el buque 'Juan Carlos I'.
"Es evidente que en estos momentos los rescates de personas son esenciales y no se puede perder tiempo. Llevan equipos adecuados para el rescate y la idea que tiene tanto UME y bomberos es, desde el mismo momento en que lleguen a Adana, ponerse a realizar operaciones de rescate", ha subrayado la titular de Defensa del Gobierno central.