El tiempo en: Campo de Gibraltar

Punta Umbría

Norman Foster dice que la arquitectura conforma la vida del ser humano

El arquitecto británico Norman Foster, que presentó ayer en Madrid su película biográfica ¿Cuánto pesa su edificio, señor Foster?, dijo a Efe que, ?exactamente, un edificio es como una vida?, porque la arquitectura conforma la vida del ser humano que crece y vive en un edificio.

Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai
  • El arquitecto británico Norman Foster. -
El arquitecto británico Norman Foster, que presentó ayer en Madrid su película biográfica ¿Cuánto pesa su edificio, señor Foster?, dijo a Efe que, “exactamente, un edificio es como una vida”, porque la arquitectura conforma la vida del ser humano que crece y vive en un edificio.

Foster, en entrevista con Efe, habló distendidamente sobre el equilibrio que mantiene entre su ideario de crear espacios aptos para el bien público y que faciliten la convivencia saludable en las sociedades contemporáneas, y la necesidad de privacidad del hombre.

Dos aspectos que desarrolla ampliamente el documental ¿Cuánto pesa su edificio, señor Foster? que hace dos semanas recibió el Premio del Público al Mejor Filme Europeo de 58 Festival de Cine de San Sebastián.
“La película transmite un mensaje muy importante y fundamental: la importancia que tiene la arquitectura junto con las infraestructuras y el urbanismo, es decir, el espacio público de una ciudad”, señaló.

Para Foster (Manchester, 1935), la arquitectura supone un reflejo del poder político y socioeconómico y una manera de alcanzar un mundo más justo, facilitando la vida en las urbes, cada vez más masificadas, y el consumo de energías sostenibles.

La energía del planeta es limitada, por ello Foster, junto con su equipo formado por unos 1.400 empleados, propugna el diseño de espacios que tengan en cuenta las condiciones meteorológicas del lugar en el que van a construir y el entorno urbano.

“Todo es diseño, y la calidad del diseño afecta la calidad de nuestras vidas”, afirmó.

De ahí que parte de la innovación del Estudio Foster radique en que el arquitecto siempre tiene en mente un parámetro de calidad que bebe de la condición minimal: “Menos es más”.

Una premisa que en la práctica se observa, por ejemplo, en el uso de la luz solar que inunda el aeropuerto internacional de Pekín, que es el más grande del mundo, o en la cúpula acristalada de la sede reconstruida del Parlamento alemán o Reichstag, en Berlín, recordó Foster, que acaba de publicar, en Ivory Press, su libro Drawings 1958-2008.

En la actualidad, Foster rompe otra vez los límites de la ciencia ficción con la construcción, en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), de la Ciudad Masdar, que se considera el primer proyecto mundial de una urbe en la que sólo se usen energías sostenibles y sin emisiones de carbono.

Se trata de un hábitat totalmente revolucionario levantado bajo un ideario filosófico: “Redescubrir cuál es la relación entre los edificios y la naturaleza, teniendo en cuenta que la energía no es algo que sea ilimitado”.

Aunque el británico dijo que la arquitectura “no es sólo la energía, sino la calidad de los espacios y los edificios en los que vivir”, que marcan al ser humano y en consecuencia, a la sociedad.

Una idea que Foster sintetizó en la cita atribuida al político británico Winston Churchill: “Nosotros damos forma a nuestros edificios y ellos también nos dan forma a nosotros”.

En un edificio, como en la vida –apuntó el arquitecto–, existe “un punto de equilibrio entre la necesidad de tener amigos y familia y felicidad”, y la necesidad de soledad y privacidad del hombre.

Un equilibrio que Foster, como cuenta en el documental How much does your building weigh, Mr. Foster?, busca en situaciones con silencio, en las que reflexiona y, también, se supera a sí mismo, como cuando practica en solitario ciclismo, vuelo sin motor y esquí campo a través.

Gustos que revela este filme, que ha sido producido por su esposa, la española Elena Ochoa, y también muestra el lado más humano de este arquitecto estrella de 75 años, como su constancia, su disciplina, su capacidad de trabajo y su serenidad.

Pero, ante todo, su fuerza mental: Foster ha superado un cáncer y un infarto.

Una fortaleza que los codirectores de la película señalaron que han aprendido de Foster, para quien “todo es posible”.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN