El vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, ha asegurado este jueves en Sevilla sobre las negociaciones entre la Unión Europea y el Reino Unido acerca del protocolo de relaciones con Gibraltar tras el Brexit, la salida del país anglosajón del entorno jurídico comunitario, que "en Gibraltar hay una negociación que dura más de lo que se esperaba".
Ha reconocido, ante el ofrecimiento de que sea Frontex el organismo encargado de supervisar el paso de trabajadores españoles por la Verja, que "nuestros amigos británicos creen que Frontex es muy europeo".
Schinas se ha pronunciado así durante el coloquio posterior a su participación en un desayuno informativo del Grupo Joly, donde le ha presentado el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.
El vicepresidente de la Comisión Europea ha defendido ese desempeño de Frontex en la Verja por tratarse de "una agencia europea para asumir este tipo de responsabilidad", para reconocer que "efectivamente, no habrá resultado antes de las elecciones europeas", que se celebran el 9 de junio.
"Creo que algunos implicados en la negociación quisieron proyectar un cierto optimismo que en los hechos no está pasando así", ha afirmado Schinas.
El vicepresidente comunitario ha apuntado que esa negociación "la está llevando a cabo mi colega vicepresidente Maros Sefcovic, mi colega eslovaco", antes de explicar que "hemos intentado desde nuestra comisaría ayudar porque parte de la negociación es cómo se controlará la verja, el acceso de los trabajadores españoles, europeos, que entrarán en Gibraltar".
Schinas ha llegado a exclamar "español" seguidamente a que el presentador del coloquio haya mencionado Gibraltar, para argumentar que "digo Gibraltar español con más comodidad desde el Brexit", antes de explicar que "no es el único ámbito donde las cosas se hacen mejor desde el Brexit", de lo que ha puesto como ejemplo la iniciativa de crear un diploma europeo, convencido de que "esto sería impensable con Reino Unido dentro de la Unión Europea" al argumentar que "ellos no aceptarían nunca cualquier diploma europeo porque esto afectaría a su mercado anglosajón".