Todo comenzó en la madrugada del martes, en torno a las 04:26 la policía recibía una llamada acerca de una de las viviendas situadas en lo más alto del edificio Wave Crest House, que alertaba de que en el interior de la vivienda afectada se encontraba la familia atrapada y pidiendo auxilio. Ante el accidente se movilizaron tanto bomberos como policía.
Ambos equipos de seguridad evacuaron a los residentes y lograron rescatar a los cinco residentes de la vivienda en llamas, que fueron inmediatamente trasladados al Hospital San Bernardo para su tratamiento, con dos de ellos moviéndose a la Unidad de Cuidados Intensivos. A pesar de que ninguno ha fallecido, tristemente el perro de la familia perdió la vida en el accidente y varios apartamentos cercanos sufrieron algún daño por el agua utilizada para el apagado de las llamas.
El principal sospechoso, un joven español de diecinueve años con residencia en Castellar, fue detenido por dos detectives poco antes de las dos del mediodía. Actualmente se encuentra detenido en las instalaciones del peñón hasta que la policía logre esclarecer del todo los hechos.