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Rasmussen insiste: "no hay cambio alguno en el calendario" para el relevo en Afganistán

"Quiero insistir en que no hay cambio alguno en el calendario"

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El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha insistido este miércoles en que "no hay cambio alguno en el calendario" pactado por los países de la OTAN y las autoridades afganas para completar el relevo en la responsabilidad de la seguridad a las fuerzas afganas a finales de 2014 después de que Australia anunciara este martes que prevé completar el repliegue del grueso de sus tropas de combate en 2013.

"Quiero insistir en que no hay cambio alguno en el calendario. Mantenemos la 'hoja de ruta' y el calendario que adoptamos en la última cumbre de la OTAN en Lisboa en noviembre de 2010", ha recalcado el danés en rueda de prensa al término de la primera sesión de trabajo de los ministros de Defensa de la OTAN.

Rasmussen ha insistido en que los aliados pactaron en Lisboa que el proceso para transferir la responsabilidad de la seguridad a las fuerzas afganas "se completará a finales de 2014" pero ha reconocido que "para poder cumplir este calendario" los aliados deberán entregar las "principales" responsabilidades de seguridad a las fuerzas afganas "en algún momento en 2013, probablemente a mediados".

El danés ha dejado claro que la transferencia de la responsabilidad "plena" en las provincias a las fuerzas afganas "lleva entre 12 y 18 meses" y por ello "no hay contradicción" con el plan de retirada pactado, que se completará a finales de 2014.

"El hecho es que la transición se completará a finales de 2014 porque lleva entre 12 y 18 meses implementar en realidad la transición", ha recalcado. "Por ello, tendremos que entregar las últimas provincias para ponerlas bajo la principal responsabilidad de las fuerzas de seguridad afganas en 2013 para que la transición se pueda completar a finales de 2014", ha insistido.

"Obviamente durante el proceso de transición, el papel de nuestras tropas cambiará gradualmente del combate al apoyo, pero seguiremos realizando operaciones de combate durante todo el período de transición hasta finales de 2014. Así que al final, no hay cambio alguno respecto a la hoja de ruta de Lisboa", ha insistido.

Australia espera que las fuerzas afganas asuman la dirección de la responsabilidad en Uruzgán, donde tiene desplegados la mayor parte de sus 1.550 efectivos actuales, "probablemente" en "el próximo mes" bien de forma total o parcial, según explicó esta mañana el danés.

AUSTRALIA SE SUMA A FRANCIA

Ello permitiría, tal y como anunció ayer la primera ministra australiana, Julia Gillard, que Australia repliegue "el grueso" de sus fuerzas de combate pasados los 12 o 18 meses que lleva completar la transferencia del control de un distrito o provincia. "Al final de la transición traeremos de vuelta a casa al grueso de nuestra gente", aseguró ayer la australiana.

Además, "Australia estará preparada para ofrecer entrenamiento a las fuerzas de seguridad nacional afganas después de 2014" y no descartó que sea necesario mantener "algunas fuerzas especiales" sobre el terreno "para asistir en la tarea antiterrorista", explicó Gillard.

Australia se suma así a los pasos de Francia, que ya anunció hace varios meses que replegará sus tropas de combate en 2013, una vez complete la transferencia en Kapisa, provincia que está bajo su responsabilidad en el este del país. Francia prevé mantener "varios cientos" de efectivos para seguir entrenando a las fuerzas afganas más allá de 2014, según fuentes de la OTAN.

Aunque el secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, también admitió en febrero la intención de Estados Unidos de retirar a sus fuerzas de combate en 2013, posteriormente rectificó y dejó claro que seguirá participando en operaciones de combate contra la insurgencia hasta finales de 2014.

En cualquier caso, Estados Unidos, Reino Unido y Australia defienden la posibilidad de mantener fuerzas especiales en Afganistán para seguir apoyando los esfuerzos antiterroristas más allá de 2014 y no limitar sólo la asistencia a entrenamiento y asesoramiento, aunque será la tarea "fundamental" a partir de entonces, según fuentes de la OTAN.

Canadá y Países Bajos desde hace meses ya no participan en operaciones de combate en Afganistán y se centran sólo en labores de entrenamiento. Canadá dejó de hacerlo el pasado verano de 2011 y redujo su contingente desde los 2.500 efectivos a los 950 que mantiene en la actualidad, mientras que el Gobierno de La Haya, que hoy cuenta con 167 efectivos frente a los 1.500 que llegó a tener desplegados, dejó de participar en operaciones de combate un año antes.

FINANCIAR LAS FUERZAS AFGANAS

Rasmussen ha explicado que espera que en la cumbre de Chicago, en la que los aliados deben decidir las siguientes etapas del relevo en Afganistán y el tipo de apoyo que seguirán prestando al país, los aliados cuenten con "una imagen clara del tamaño, estructura y coste de una fuerza de seguridad afgana sostenible a largo plazo".

Los aliados estiman que serán necesarios unos 4.100 millones de dólares anuales para sostener una fuerza de 228.500 efectivos de Policía y del Ejército afganos, aunque todavía no han decidido si finalmente se reducirán a este número, frente a los 352.000 efectivos que esperan haber terminado de formar este verano.

La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, se reunirá este miércoles con el primer ministro belga, Elio Di Rupo, para discutir la aportación de Bélgica, a la que Washington ha pedido 15 millones de dólares (11,5 millones de euros) anuales.

Rasmussen ha confiado en que los aliados contribuyan a financiar una "parte justa" tras recordar que "es menos costoso financiar las fuerzas de seguridad nacional afganas que desplegar tropas internacionales", aunque "es un poco prematuro aventurar cifras concretas".

"Las reuniones de hoy y mañana no son conferencias de donantes, de modo que no espero anuncios concretos en esta reunión. La cumbre de Chicago tampoco es una conferencia de donantes, pero espero una imagen clara del tamaño, estructura y coste de una fuerza de seguridad afgana sostenible a largo plazo", ha explicado. "Recibiremos los compromisos más concretos de los países individuales más adelante", ha confirmado.

Washington ha reclamado que los 50 países que contribuyen a misión aporten 1.300 millones de dólares anuales (unos 994,2 millones de euros) entre 2015 y 2018 y que el Gobierno afgano proporcione otros 500 millones de dólares (unos 382,5 millones de euros), según fuentes de la OTAN.

Estados Unidos se compromete a aportar "el resto" hasta llegar a los 4.100 millones de dólares (cerca de 3.136 millones de euros) necesarios para sostener unas fuerzas afganas de unos 228.500 efectivos, según fuentes de la OTAN. A España le ha solicitado 30 millones de dólares (unos 22,9 millones de euros) anuales entre 2015 y 2018.

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