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España

Ignacio González lamenta que no se condene los insultos a Aguirre en el partido

Es "evidente que se estaba preparando un acto de agresión, una vez más, a los símbolos de España"

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  • Durante la pitada. -

 

El vicepresidente y portavoz del Gobierno regional, Ignacio González, asegura que es "lamentable" que "tres días después" de que se haya celebrado el partido de la Copa del Rey donde hubo insultos desde las gradas dirigidos hacia la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, nadie haya salido a condenarlos.
 
   En declaraciones a la Cadena Cope, recogidas por Europa Press, González ha dicho que lo que ocurrió el viernes en la final de la Copa del Rey, donde se produjo una sonora pitada cuando sonaba el himno, demuestran que es "evidente que se estaba preparando un acto de agresión, una vez más, a los símbolos de España".
 
   En su opinión, eso "debería haber provocado que tanto los dirigentes de los clubs como los de la Federación Española y los de las comunidades autónomas de los equipos que se enfrentaban hubieran hecho un llamamiento para que eso no se produjera porque es la obligación de todos respetar los símbolos" que unen a los ciudadanos españoles.
 
   Sin embargo, ha lamentado que "no solo no se produjo" sino que se hizo "muy patente" que esas convocatorias que se habían hecho en sentido contrario "tuvieron su reflejo" y "tres días después es muy lamentable que ninguno de ellos lo haya condenado rotundamente una vez que se han producido esos insultos y esas pitadas a los símbolos y a la presidenta de la Comunidad de Madrid".
 
   Para González, "la libertad de expresión tiene que hacerse en el marco de los respetos de todos y en el marco constitucional" y, precisamente, esa "dejadez" a la hora de condenar este tipo de actos "es la que provoca que se vaya perdiendo el respeto por los símbolos que unen" a los españoles.
 
   Según González, esto "es una vergüenza" y ha asegurado que si se hubiera producido en sentido contrario "y alguien hubiera manifestado esa oposición a la bandera de Cataluña o al País Vasco o a sus señas de identidad, se hubiera armado aquí un lío gordísimo". "No entiendo por qué cuando se trata de defender los símbolos de España esa misma reacción no se produce", ha concluido.

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