La Asociación Ayuda al Pueblo Saharaui de Jaén ultima los detalles para recoger en la madrugada del viernes a los 85 niños que pasarán sus vacaciones con familias jienenses.
Después de cuatro años sin subvenciones, la Asociación, con la ayuda de las familias, ha consegudo poner en marcha una vez más el programa 'Vacaciones en Paz' y en la mañana del viernes, llegados desde los refugios de Tinduf a Málaga y desde ésta a Jaén, los niños comenzarán su descanso con las familias de Jaén.
Del total de niños, seis vivirán la experiencia por primera vez. Igualmente, este año llegan niños discapacitados, en torno a cuatro, que serán atendidos por los profesionales de la Asociación Provincial Pro - Minusválidos Psíquicos de Jaén (Aprompsi).
Hasta el próximo 29 de agosto, los menores, de entre 8 y 12 años, disfrutarán de dos meses de actividades y jornadas de convivencia en familia. “Los niños disfrutan muchísimo y es una experiencia muy buena para ellos”, valora la vicepresidenta de la Asociación, Ana Arboleda.
Sin embargo, los niños que llegan por primera vez son más mayores, ya que, en otras asociaciones no piden niños porque no hay familias demandantes y son muchos los que en años anteriores se han quedado sin vivir esta experiencia.
El coste económico que una familia soporta por traer a Jaén a un niño saharaui desde los campamentos de Tinduf es de más de 600 euros. “Es la cantidad que abonan por traerlos, a lo que hay que añadir los gastos de los dos meses. Las familias en Jaén siguen siendo muy solidarias”, valora Arboleda.
La estancia en la ciudad, el ocio, la alimentación y las revisiones médicas, aseguran desde la Asociación, tienen un coste “más emocional” que económico.
Durante su estancia en la capital, las familias se comprometen a realizar una revisión médica a los menores y desde la Asociación ejercen un control de la estancia de los niños saharauis con las familias.
Los responsables del programa se muestran “muy agradecidos” a la colaboración de las instituciones públicas, ya que durante los dos meses, los niños son recibidos por autoridades como el alcalde o el presidente de la Diputación, que comparten con los menores un desayuno.
