La Delegación Municipal de Tráfico, a través de la Policía Local, ha realizado un primer balance de la aplicación del plan para regular la circulación de vehículos en las proximidades de los centro educativos chiclaneros, realizado en colaboración con la Delegación de Educación y las asociaciones de padres y madres de alumnos, en la que muestra su satisfacción por los resultados obtenidos.
En este sentido, el edil de este área municipal, Agustín Díaz, ha calificado de “muy elevado el nivel de colaboración puesto de relieve por las asociaciones de padres y madres de alumnos, siempre con el objetivo común de garantizar la seguridad de los escolares a la entrada y salida de los colegios y agilizar el tráfico rodado en estas zonas”.
Uno de los puntos destacados en este balance es el relativo a la visita de la Policía Local diariamente a dos colegios, de forma alternativa entre todos los de la ciudad, al objeto de vigilar el cumplimiento de la señalización y, en su caso, denunciar las infracciones cometidas. En la mayoría de los casos, las citadas denuncias han estado relacionadas con el estacionar sobre las aceras y con la circulación por calles en las que está prohibido hacerlo durante el horario escolar.
Asimismo, este compromiso de cooperación se ha manifestado también en el hecho de que otro porcentaje alto de requerimientos ha sido la denuncia por parte de los propios padres, de la falta de civismo de algunos conductores que incumplían la señalización establecida, “lo que ha permitido a los agentes de la policía actuar en consecuencia”.
Por contra, el informe de la Delegación de Tráfico señala que la mayor parte de las actuaciones de la Policía Local han venido por el vandalismo sufrido en los distintos dispositivos de tráfico instalados en los centros educativos, de tal manera, ha añadido Agustín Díaz, “se ha tenido que reponer en alguno de casos hasta tres veces en la misma semana, lo cual, además de suponer una infracción penal, acarrea un gran gasto para las arcas municipales”.
Como se recordará, este plan de circulación en las zonas próximas a los centros educativos establecía la peatonalización de catorce calles, y el cambio total o parcial en el sentido de la circulación en dieciocho de ellas, en función de las características del tráfico en cada uno de los colegios, y según las propuestas realizadas por las propias Ampas.
Para ello, se estableció que en seis de los centros educativos de la ciudad, La Barrosa, Las Albinas, Alameda, Tierno Galván, Isabel la Católica, y El Olivo, los miembros de las Ampas colocarían dispositivos móviles para impedir el acceso de vehículos a la entrada y salida de los alumnos. En otros tres, El Castillo, El Mayorazgo, y El Trovador, la solución pasó por la peatonalización definitiva de las calles en las que se asientan estos centros, mientras que en el resto se ha contado con señales que prohibían el tráfico en horario escolar.
Además, la Policía Local habilitó una línea telefónica con los centros escolares, de manera que pudiesen informar y denunciar cualquier incidencia o problema. Por último, los agentes locales han mantenido cuatro puntos fijos de control del tráfico en las zonas de la carretera de Fuente Amarga en su confluencia con la calle Solfeo, la Avenida de la Música con la calle Marcha, la rotonda de Lorenzo Delgado y la rotonda situada en la intersección de la Avenida de la Diputación con la de los Estudiantes.