La manifestación convocada por los sindicatos UGT y CCOO, así como por IU, a propósito de la Huelga General del 14-N, contó con un apoyo social más importante que en otras ocasiones, hasta registrar la salida de unas 500 personas desde la plaza Modesto Gómez, en el Barrio Bajo, y de alrededor de 300 desde la plaza América, en las Canteras. Ambas concentraciones partieron según lo previsto portando pancartas contra los recortes del Gobierno y consignas contra los bancos, el PP e incluso contra el sistema capitalista.
Ambas manifestaciones coincidieron en el Paseo de Andalucía, donde fueron en torno a 1.000 las personas participantes, ya que en ese lugar se sumaron incondicionales, curiosos y otras personas convencidas de la validez del acto reivindicativo. Todo ello bajo unas fuertes medidas de seguridad, con presencia tanto de la Policía Local como de la Guardia Civil, algunos de incógnito entre los manifestantes.
En el Paseo tuvo lugar la lectura del manifiesto del día, de lo que se encargó el sindicalista e izquierdista Jesús Morales. A partir de ahí, la manifestación, haciendo tal vez caso omiso del permiso de la Subdelegación, que hubiera consentido el acto hasta el mencionado Paseo, discurrió hasta el Ayuntamiento de la ciudad, en la avenida Miguel Mancheño. Una vez allí, un sector lanzó algún insulto contra el alcalde y críticas contra una presunta política de enchufismo.
Pero la imagen del día fue más allá de la manifestación, pues el cierre del comercio fue masivo, incluyendo las entidades bancarias, aunque algunos bares decidieron abrir. En este sentido, de momento no han trascendido incidentes derivados de las aperturas, de lo cual se desprende que el respeto a la decisión personal ha primado durante la huelga.
En cuanto a las impresiones, Ángel Fernández (IU) señaló que “es muy importante que la población haya apoyado la huelga, así como las fuerzas de izquierda. Los sindicatos han sido un vehículo para convocar, pero si la huelga es un éxito es un éxito de todo el pueblo, y su fuera un fracaso sería igualmente un fracaso de todo el pueblo. La gente ha dicho que ya está bien de que se le pisotee desde un gobierno y desde las grandes corporaciones internacionales que no son democráticas, empresas de inversión y el Banco Central Europeo, que nos obligan a caer en la pobreza”.
Igualmente, apuntó que el sistema no conseguirá dividir a trabajadores, parados y autónomos, de ahí que sentenciara la necesidad de que “la gente permanezca unida en estos momentos”.
En semejantes términos, el diputado provincial y alcalde de Espera de IU, Pedro Romero, se mostró sorprendido por la cantidad de personas reunidas en el Paseo, ya que en otras ocasiones ha mostrado su malestar por la escasa afluencia de manifestantes en convocatorias anteriores, entre ellas las del sindicato que representa, el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT).
Romero Valverde hizo un ejercicio autocrítico al apuntar como culpables de la situación nacional a “los políticos”, pero también dijo que “no todos estamos en la misma línea”. El mismo lamentó que el anterior gobierno socialista se rindiese a la banca y que dejara “caos el país para que después lo rematara el PP”. No obstante, culpó a la banca de los desahucios que sufren miles de familias españolas: “Han tenido que morir personas para que los partidos mayoritarios de España, aunque no hayan dejado participar a IU en las comisiones, para que se frene esa masacre de los desahucios”.
Desde el PSOE-Arcos, su secretario General, Isidoro Gambín, se congratuló del “éxito” de la convocatoria: “Hemos lanzado un mensaje claro y alto al Gobierno del PP, que los ciudadanos ya no pueden más. Es un argumento muy sólido para que el Gobierno desvíe su política económica y social, hacia otras que ayuden al ciudadano. Que haya recortes, pero sin tocar los servicios esenciales para los ciudadanos: la salud, la educación, la ley de dependencia…”. Gambín aprovechó para criticar que Ai-Pro, socio de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Arcos, no participara en la manifestación a pesar de que teóricamente es un partido de izquierdas: “Ai-Pro ha fallado a su militancia, a sus votantes y los ciudadanos. Eso ha quedado patente en la manifestación, pero no me preocupa, porque Ai-Pro dice que la huelga va a ser un problema para los empresarios. Ahí demuestra que se ha decantado por la derecha local y nacional”.
También Ecologistas en Acción tuvo participación en el encuentro. El portavoz Luciano Lozano destacó el importante número de manifestantes, y cargó las tintas contra el sistema: “El capitalismo no tiene futuro, se ha acabado, pero los capitalistas quieren sobrevivir, y lo que harán será privatizar, privatizar y privatizar, dejar que la distribución de riquezas sea cada vez menor y que estén en manos de unos pocos, que siempre ha sido así…, pero ahora más. Hasta que no iniciemos una economía social, esto no tiene futuro. Y que sepamos que no podemos pagar la deuda, eso es un juego maquiavélico. Aunque suene a utopía, tenemos que conseguir entre todos un mundo nuevo.
Desde la Delegación municipal de Personal se ha valorado la incidencia de la Huelga General en un 3 por ciento dentro de la plantilla de los trabajadores municipales. Ha sido un total de 21 personas las que han secundado la huelga. El propio delegado de Personal, Carlos de la Barrera, ha considerado que la mayor incidencia ha sido en aquellos trabajadores que están trabajando en la calle, frente a los que lo hacen en oficinas. En este sentido, ha manifestado que “quizás este hecho pueda deberse a que aquellos trabajadores de obras han podido sentir miedo por las movilizaciones previstas en la calle y se han visto más obligados a sumarse a la huelga”.