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El Puerto

Sonrisa incompleta en Alcalá

Un gol de falta en el tramo final de Fernández, imposibilitó la victoria racinguista, que gozó toda la segunda parte con un jugador más tras la expulsión de Jaime. El Racing volvió a cuajar un partido serio y convincente.

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Dicen los entendidos que con 10 se juega mejor que con once. Todas las lecturas son respetables siempre que se vean acompañadas con resultados positivos. Esa teoría futbolística se la tomó como buena el CD Alcalá, que supo empatar a dos minutos para el final, a base de garra y pundonor al jugar 45 minutos con un jugador menos, ante un Racing Portuense que volvió a certificar un partido completo y vistoso, pero que no supo matar.

El Racing Portuense, por tercer año consecutivo, terminó empatando a dos goles en el Ciudad de Alcalá. Fiel a las estadísticas, el encuentro resultó animoso y con un ritmo que no decayó un ápice, siendo la mejor prueba demostrativa de que los de Mere se enganchan nuevamente al buen juego y a los resultados positivos lejos de Valdelagrana.

Caer con estrépito en el último partido del año ante el Ceuta, parece haber servido de lección a un equipo que continúa sin echar de menos las ausencias significativas, que semana tras semana va acumulando.

Con tres variaciones obligadas en el once inicial respecto al domingo pasado, la presencia de Raúl López al lateral izquierdo, volvió a lucir la defensa titular liguera.

Por delante de éstos, el canterano Rober, algo intermitente y sin el desborde habitual en él, acompañó a Natera que sirvió de enganche con Rafi Cruz, que volvió a ser el único hombre como punta de lanza.

Nuevamente, tal y como sucediera ante el Pozoblanco, los rojiblancos salieron a por el partido desde el minuto 1. Nada de contemplación ni de esa dejadez que le ha ido costando algún que otro contratiempo a lo largo de la temporada. Intensidad, ritmo y mucha velocidad al balón fueron los argumentos exhibidos.

Con un juego combinativo, asociativo y muy directo, resultó letal con la rapidez con la que se emplearon, ante un conjunto sevillano que se vio desbordado por momentos.

No es menos cierto, que la primera llegada llevó la firma sevillana, cuando en el 4’ tuvo el primer acercamiento, aunque su lanzamiento acabaría lejos del portal de Ismael.

La respuesta portuense no tardó en llegar por mediación de Rafi Cruz que ajustó su lanzamiento, saliendo lamiendo la base izquierda de la meta de un pletórico Cobaleda, que se erigió en el mejor de los locales. Gracias a la intervención del guardameta hispalense, el Alcalá obtuvo un resultado favorable.

Con el susto en el cuerpo, el choque se terminó por abrir de par en par con ocasiones y llegadas por parte de ambos bandos.

La intensidad y la velocidad del balón encontró una nueva aproximación por parte racinguista. Así, Natera, que sólo ante el portal, mandó alto tras recoger un pase de la muerte dejado intencionadamente por Rober. El run run de la grada local barruntada un futuro nada halagüeño ante el dominio visitante.

El Alcalá empezó a sufrir las llegadas constantes por parte del Racing Portuense, que se fueron multiplicando según pasaban los minutos. El toledano Raúl Silveira lo intentó, aunque su lanzamiento nuevamente salió lejos.

Y tanto llegó el cántaro a la fuente, que al filo del descanso, minuto 40’, Álex Natera, de cabeza, certificaba justamente e inauguraba el marcador.

El panorama se le complicaba a los de José Antonio Asián, que veía como Jaime, último defensor, debía abandonar el terreno de juego tras ser expulsado, tras cortar intencionadamente un balón con la mano en la frontal del área.

Cambio de tornas

Con 0-1 y con un jugador más, los racinguistas enfilaron el túnel de vestuarios con una sonrisa en la boca. Lo que pudiera parecer una segunda parte mucho más plácida, encontró una respuesta rápida y sorpresiva. En un visto y no visto, Melo igualaba el partido en el minuto 4.


El jarro de agua fría reavivó la esperanza sevillana, dando alas a un Alcalá que empezó a buscar un segundo gol, viniéndose arriba. La inferioridad numérica no consiguió amedrantar a los alcalareños y que lejos de ello, puso en aprietos al portal de Ismael.

La entrada del madrileño Matallanas buscó ordenar el tráfico en la zona ancha. Precisamente, el medio centro remataba de cabeza un córner, marcando el 1-2. Un minuto antes la tuvo Rafi Cruz, sacando in extremis un defensor. Y cuando la victoria ya parecía tener color rojiblanco, a dos para el final, Fernández igualaría el choque tras un lanzamiento de falta en la frontal del área. Reparto de puntos en un partido loco.

Lamentar la expulsión de Capi por doble amarilla, que será baja ante el San Roque y que contará con la vuelta de Sergio Beato.

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