El Pleno de la Diputación de Córdoba ha aprobado este miércoles, en sesión extraordinaria, con los votos a favor del gobierno del PP y del diputado de Unión Cordobesa (UCOR) Rafael Gómez, y la abstención del PSOE, de IU y del diputado de UCOR Carlos Baquerín, el expediente definitivo del presupuesto consolidado de la institución provincial para 2014, que incluye el montante destinado a sus empresas y organismos autónomos y que asciende a 277.040.923 euros, lo que supone un incremento respecto al presupuesto de 2013 de 4,2 millones, mientras que el presupuesto no consolidado para este año suma 210.792.555 euros.
Durante el pleno, el vicepresidente primero y delegado de Hacienda de la Diputación, Salvador Fuentes, ha agradecido "el compromiso y la responsabilidad de los distintos grupos políticos de la Corporación con este presupuesto", ya que "lo hemos afrontado con una base clara de fomento del diálogo, para que sea el gran pacto por el futuro de la provincia de Córdoba".
Así, respecto al primer proyecto presentado por el equipo de gobierno del PP y atendiendo a las enmiendas parciales presentadas por PSOE e IU, se han introducido algunas modificaciones. De este modo, según ha detallado Fuentes, se han incrementado las partidas para el Programa de Fomento y Colaboración con los Municipios y ELAs por valor de 680.400 euros; para el Plan Provincial de Generación de Empleo en Ayuntamientos, por una cuantía de 200.000 euros, y para el Plan de Eliminación de Barreras Arquitectónicas y el Programa de Mejora de Caminos y Vías Rurales Municipales, con 300.000 euros cada uno, entre otros.
Por su parte, el portavoz del gobierno del PP en la institución provincial, Andrés Lorite, ha afirmado que "el presupuesto es común y compartido en sus líneas generales, que son el empleo, las políticas sociales y la inversión productiva en obra pública, que son las que necesita Córdoba para generar dinamismo social y económico".
En relación a las políticas sociales, Lorite ha subrayado "el aumento a la ayuda a la dependencia, pues se ha subido a 12,50 euros por hora el abono a las 1.400 trabajadoras a las que paga la Diputación", a lo cual hay que unir "la creación del cheque bebé de 300 euros para familias de entornos rurales con rentas bajas" y, además, "se sigue apostando por programas de índole social, como el de Ayuda Económica Familiar, o el de Empleo o Emergencia Social".
Respecto a la inversión, el diputado ha especificado que el nuevo presupuesto "es palanca de crecimiento económico para nuestra sociedad y generadora de empleo en todo el territorio provincial", destacando, finalmente, que "la de Córdoba es la más inversora de las ocho diputaciones andaluzas", en función del porcentaje que dedica a inversión respecto a su presupuesto total, que en este caso asciende al 22%, lo cual implica "casi 46,2 millones de euros", que equivalen a "57,5 euros de inversión por habitante".
"ABSTENCIÓN CRÍTICA" DE LA OPOSICIÓN
En cuanto a la oposición, mientras que los dos diputados de UCOR dividían sus votos, Rafael Gómez apoyando el nuevo presupuesto y Carlos Baquerín absteniéndose, tanto el principal grupo de la oposición, el PSOE, como IU, han coincidido en afirmar, por boca de sus respectivos portavoces, Salvador Blanco y Francisco Martínez, que su posición a la hora de votar el proyecto presupuestario ha sido la de una "abstención crítica".
A este respecto, Blanco ha explicado que los socialistas no votaban en contra y se abstenían al haber sido aceptadas por el PP "en parte" sus propuestas, "que mejoran el presupuesto", al haber logrado incrementos en las partidas para empleo, que "han pasado de tres a 4,3 millones de euros, aunque pedimos cinco"; para los municipios, "que han aumentado de 3,3 a cuatro millones, aunque también pedimos cinco", y también financiación para las mancomunidades. Sin embargo, según ha argumentado, "el PSOE habría hecho otros presupuestos" y por eso le ha dado a éstos su "abstención crítica", pues "hay demasiadas partidas genéricas", lo que indica "falta de transparencia".
En parecidos términos se ha pronunciado el portavoz de IU, Francisco Martínez, quien ha asegurado que su grupo también daba una "abstención crítica", al haberse aceptado enmiendas suyas por valor de unos cuatro millones de euros, a un proyecto presupuestario para cuyo estudio solo tuvieron "dos días" y con el que no se identifican, pues "solo recoge números, pero ni proyecto, ni objetivos concretos", lo cual "le ahorra luego al PP justificar el nivel de cumplimiento".