Los trabajadores de la Escuela de Hostelería La Cónsula, en Málaga capital, han vuelto a alzar la voz. A punto de concluir este mes de mayo, fecha que fijó la Junta de Andalucía para hacer efectivo el pago de las tres nóminas adeudadas, los empleados han anunciado que en los próximos días concretarán acciones y movilizaciones si no se produce una solución "efectiva" a la situación actual.
Así, en un comunicado han incidido en que desde julio del pasado año la Junta de Andalucía, que es la que gestiona los fondos europeos de los que depende la escuela, no aporta dinero, y han señalado que se sienten "agraviados" por la gestión que realiza el Gobierno andaluz en sus trámites administrativos entre las diferentes consejerías.
Los trabajadores, han recalcado, no son "responsables" de estos trámites y han recordado que a pesar de las tres nóminas que se les adeudan, que serán cuatro en breve si no se realiza el pago de mayo, continúan realizando su trabajo con normalidad. Por ello, han exigido el abono íntegro de las mismas porque se encuentran "en una grave situación".
El futuro del centro, a pesar de que el plazo de presentación de solicitudes para el próximo curso escolar está actualmente abierto y concluirá el 15 de junio, los empleados han lamentado que no haya un "futuro estable dentro del tejido educativo andaluz como escuela pública".
De este modo, han demandado un sistema de financiación "normalizado" que no dependa de las subvenciones y que permita el pago dentro de los plazos establecidos. En este sentido, han reclamado al Ayuntamiento de Málaga que "concrete y realice" las ofertas de ayuda que ha realizado y que permita inyectar "la urgente liquidez que necesitamos".
En este sentido, desde el Consistorio han sostenido, después de las reuniones con técnicos de la Junta de Andalucía, que no hay déficit en La Cónsula, aunque sí un desfase de unos 1,5 millones de euros. De hecho, está dispuesto a aportar en 24 horas y procedente del fondo de contingencia lo que le corresponda en función de su peso en el consorcio para acabar con la deuda actual y negociar nuevas fórmulas de funcionamiento que eviten situaciones como la que se vive en la actualidad.
"CANSADOS DE BUENAS PALABRAS"
Los empleados de este centro formativo han lamentado que la "recompensa" a 20 años de trabajo en la escuela son "impagos e incertidumbre". Así, han recordado que se ha demostrado la inserción laboral, por encima del 95 por ciento, de los alumnos formados, con cuyo futuro "se está jugando".
En el comunicado, han asegurado que están "cansados de buenas palabras y reuniones infructuosas" en las que "únicamente se nos han dado plazos incumplidos apelando a nuestra buena fe y profesionalidad".
"Necesitamos hechos que palien esta situación y den una viabilidad futura a la escuela", han recalcado, insistiendo en que si no hay una solución efectiva, concretarán movilizaciones asesorados por los respectivos sindicatos.