El Sindicato Médico de Cádiz ha denunciado las medidas que la Gerencia del Área Sanitaria del Campo de Gibraltar está tomando "tendente a cumplir con los recortes y ahorro de gastos".
El colectivo critica que esta "merma de servicios y personal redunda negativamente en la atención y seguridad a los pacientes".
Entre los perjuicios destacan que "no se llevan a cabo sustituciones de las bajas maternales, lo cual no deja de ser un impedimento para un derecho fundamental de la mujer: ser madre". Así, cuando ello ocurre y haciendo uso de lo que marca la ley, se acoge a la baja materna tiene que tener en cuenta que no va a ser sustituida y que su trabajo lo tendrán que realizarlo sus compañeros que quedan en el servicio, "con el consiguiente riesgo para los pacientes por la sobrecarga de trabajo que supone".
Critican que "se recorta en exploraciones vitales como la endoscopia urgente. Hasta hace bien poco, cuando se producía una hemorragia digestiva urgente, las exploraciones pertinentes las realizaba un personal preparado para ello constituido por un Endoscopista, una enfermera y una auxiliar de clínica. La nueva norma es que el personal ayudante no sea el mencionado sino que el Endoscopista será ayudado por personal de quirófano. El problema se plantea ante la posibilidad de coincidir una urgencia quirúrgica o tocológica –como la cesárea urgente- en la que deba estar el personal de quirófano, junto a una urgencia endoscópica. Ello obligará a tener que esperar la finalización –así lo recoge el protocolo- de una de las dos incidencias con el consiguiente peligro ante el retraso para uno de los pacientes, dejándose en manos de anestesia, jefe de la guardia y/o supervisora de guardia la decisión de que es prioritario. Esto último ya lo han denunciado algunos médicos del hospital".
Por otro lado, han indicado que "hace unos días se planteó una endoscopia urgente y el Endoscopista fue auxiliado por la supervisora de guardia y una auxiliar de urgencias. Una sin experiencia alguna en este tipo de exploraciones y la otra hacia unos dos o tres años que había estado en el servicio. Existe en este caso, un escrito denuncia del Endoscopista ante la repercusión en la calidad de la endoscopia y el posible pronóstico vital del paciente. En la práctica ésto significa cerrar un servicio que ha funcionado de manera excelente durante años y y sin otra actuación pasaba a ser un refuerzo quirúrgico que ha permitido la apertura de dos quirófanos de urgencias en caso de necesidad. Además este estado de cosas genera inquietud entre los profesionales que se ven superados por normas sin ningun tipo de consenso, por lo que se han dirigido a dicha gerencia con varios escritos mostrando su disconformidad".
Por último, apuntan que "se han suspendido las continuidades asistenciales – o jornada de tarde- que permitía mantener el hospital con consultas hasta las 20.00 horas con el resultado de un deterioro de la asistencia y el aumento de las listas de espera. En definitiva, un hospital de 8 a 15 horas y el resto del tiempo cerrado".