Indudablemente, visto lo visto desde la salida del ínclito Julio Velázquez del Betis, el cuadro verdiblanco ha dado un vuelco en su objetivo de ascender a la máxima categoría del fútbol español
Son varios los motivos por los que el cambio radical en el cuadro bético; tanto en la clasificación en forma de puntos como dentro y fuera del campo, han dado sus frutos. Pues a nivel deportivo, queda fuera de toda duda que los de Heliópolis, han acrecentado sobre el terreno de juego su proyección de puntos en la clasificación; acompañado de la estabilidad institucional suficiente como para recomponer un puzzle despiezado por múltiples lugares.
La llegada de Pepe Mel tras una serie de negociaciones en busca del técnico ideal, ha logrado mantener y alargar las buenas sensaciones que dejó Juan Merino, quien cogió a un vestuario destrozado y lo revitalizó de la nada, alcanzando de forma consecutiva un pleno de cuatro triunfos; que sumados al empate en Alcorcón y a las tres victorias de Mel, el Betis en ocho jornadas ha sobrepasado con 22 puntos los 21 de Velázquez en 14.
El juego además ha ganado en vistosidad o y a falta de fútbol en encuentros complicados (véase Gijón), el oficio y la fortuna han virado de manera positiva en la tabla, situando a los verdiblancos un punto y un puesto de Las Palmas, líder de la Liga Adelante.
Una tranquilidad y paz social que ha proporcionado el nuevo consejo de administración con Juan Carlos Ollero al frente. La directiva ha sabido tomar decisiones oportunas y conceder al beticismo y a la entidad de entereza después de un largo desgobierno.
Todo ello ha favorecido que la ‘pelotita’ entre con más facilidad que en anteriores épocas; con la consiguiente asignatura pendiente de los fichajes por parte de la secretaría técnica con Alexis Trujillo a la cabeza (en consenso con Mel como premisa para su incorporación al Betis), que si bien en verano dejó que desear, en enero ha de ser más efectiva.
Figueras: "Mi relación con Mel no ha cambiado"
"El cambio en su día de entrenador de Velázquez a Merino nos vino muy bien de cara al aspecto tanto mental como psicológico en el equipo, que lo notó. Mi relación con el míster es la misma que hace un año, con la diferencia en los resultados de entonces y ahora", declaró ante los medios tras un acto oficial del club.
