Un hombre está siendo juzgado por la Sección VII de la Audiencia Provincial por supuestos delitos de violación y detención ilegal. Fuentes judiciales indicaron a este medio que para él se piden en total 20 años de prisión por ambos delitos.
Los hechos habrían tenido lugar en agosto de 2013, en una vivienda de Algeciras en la que residía el acusado. Este habría dejado por unos días la casa a una pareja de amigos mientras se sometía en Huelva a un proceso de desintoxicación.
Al regresar del citado programa, el acusado habría obligado al varón a abandonar la vivienda utilizando métodos de intimidación, concretamente, y según denunció la víctima en su momento, con un arma blanca, quedando la mujer en la vivienda.
Siempre según la versión de la presunta víctima, habría tenido que permanecer durante un periodo aproximado de dos días en el lugar y dijo haber tenido que mantener relaciones sexuales no consentidas con el ahora acusado, bajo la amenaza de un cuchillo o con las manos atadas.
Nadie en casa
Por su parte, y según la versión de la acusación, el novio de la víctima habría denunciado el hecho ante la Policía, que habría acudido al lugar esa misma tarde. Según la víctima, su agresor intentó aparentar que no había nadie en casa llevándola a la planta superior, tapándole la boca y amenazándola si hacía ruido. De este modo, y dado que él era el que residía en la vivienda, la Policía no habría podido actuar y él habría logrado ocultar el hecho delictivo.
Ayer se celebró la primera sesión de la vista a puerta cerrada, y se escuchó tanto al acusado como a la víctima, quien habría testificado en su momento que a los dos días se le dejó libre amenazada con que de contar el hecho él sabía dónde vivía.
Sin embargo, y tras haberle contado a su pareja lo sucedido, ambos decidieron interponer la denuncia, lo que ha llevado al actual proceso.
El acusado habría negado los hechos, si bien reconoce que existieron relaciones sexuales que para él fueron consentidas. También habría aportado la defensa testimonios que daban a entender que la mujer no estaba retenida contra su voluntad.
El jueves proseguirá el juicio con nuevos testimonios y pruebas periciales.
