El Sindicato Independiente de la Policía Local (SIP) y la sección sindical de CSI-CSIF en el Ayuntamiento han expresado ya su malestar con el anuncio del Gobierno local de reducir en un 5 por ciento el importe del capítulo de Personal, lo que se traducirá en nuevos recortes salariales.
Ambas organizaciones coinciden al destacar que antes de realizar ese anuncio no se ha producido comunicación directa a los representantes de los trabajadores, a pesar de que el vigente acuerdo-convenio, en su disposición adicional octava, establece la obligación de “informar previamente a la representación del personal en el caso de que se adoptasen acuerdos que pudieran afectar a sus condiciones de trabajo”.
El SIP advierte de que la paciencia de este colectivo -mayoritario en la Policía Local- “ha tocado fondo”. Además, critica que el recorte previsto afecte a conceptos tales como las productividades, la compra de libranzas, las gratificaciones, las horas extraordinarias y los cuadros horarios, “no mencionándose otros conceptos retributivos que suponen unos costes muchísimo más elevados que los anteriormente citados”.
No en vano, el sindicato sospecha que estos recortes “van enfocados mayormente al colectivo de la Policía Local”, que está integrado por 290 trabajadores, “cuando la plantilla municipal está formada por casi 1.800” personas. El SIP advierte de que no va a tolerar medidas que rayan “el más absoluto caciquismo” y el “sectarismo”, y avanza su intención de convocar a sus afiliados a una asamblea “para determinar el camino a seguir ante este nuevo atropello por parte del Gobierno”.
En esa asamblea se abordará la posibilidad de convocar algún tipo de movilizaciones, que podrían incluso coincidir con los “grandes eventos” de primavera, tales como la Semana Santa, el Mundial de Motos o la Feria del Caballo.
El Gobierno local recordó que el recorte del 5% “ya estaba incluido en los planes de ajuste aprobados en la anterior legislatura, cuando el Consistorio se acogió a los planes de pago a proveedores”.
