El base Ricky Rubio repitió actuación de doble-doble y aunque su equipo de los Timberwolves de Minnesota perdieron de visitantes por 142-130 ante los Rockets de Houston, el internacional español reconoció que juega su mejor baloncesto desde que llegó a la NBA.
Rubio, tras concluir el partido ante los Rockets, declaró que no sólo se siente muy bien físicamente, sino que además también mentalmente está mucho más fuerte y de ahí la gran confianza que posee.
"Me siento muy bien. Creo que empecé la temporada no muy a gusto, pero a partir de finales de diciembre todo cambió", destacó Rubio, que ante los Rockets volvió a ser el líder de los Timberwolves en la dirección del juego al repartir 11 asistencias. "Cambié el 'chip' y puedo decir que estoy haciendo mi mejor baloncesto".
Aunque el mismo reconoció que antes los Rockets, las pérdidas de balón (seis) no le ayudaron a tener su mejor actuación en el apartado individual.
"Bueno, individualmente no ha salido un partido muy bueno, porque he perdido muchos balones", analizó Rubio, tras admitir que no se encuentran ya con margen para perder muchos partidos, dado que se disputa la segunda vuelta de la liga.
"Hoy era un partido clave a pesar que veníamos de jugar ayer, pero bueno, los Rockets es un equipo muy difícil que está haciendo una gran temporada y no pudo darse la victoria", subrayó el jugador de El Masnou.
La asignatura pendiente de hacer más tiros a canasta y tener mayor producción ofensiva no es algo que preocupe a Rubio, aunque reconoció que trabaja en hacerlo mejor.
"Creo que la clave está en que tengo más confianza", subrayó Rubio, que disputa la quinta temporada como profesional. "Finalmente la experiencia está sirviendo, estoy buscando buenos tiros, pero no sólo eso, sino que dirigiendo al equipo que es para lo que estoy aquí", recordó el base internacional español.
El base titular de los Timberwolves aportó 14 puntos tras encestar 3 de 8 tiros de campo, incluidos 2 de 5 triples, y 6 de 7 desde la línea de personal en los 32 minutos que estuvo en la pista del Toyota Center, donde también capturó tres rebotes.
Rubio también es consciente que su aportación será importante de cara a la gran meta de alcanzar por fin los playoffs, algo que de nuevo lo tienen complicado, aunque están mentalizados para luchar al máximo.
"Estamos mentalizados para alcanzarlos, pero tenemos que hacer un gran final de temporada", adelantó Rubio. Sabemos que es muy complicado, pero estamos solo a tres o cuatro partidos de ellos".
El líder en la dirección del juego de los Timberwolves, que cuenta con todo el apoyo del entrenador Tom Thibodeau, es consciente de esa realidad y del margen real que tienen de cara a la recta final de la temporada regular.
"Nos quedan más de 20 partidos y tenemos que perder muy pocos para poder entrar y bueno esa es la mentalidad que hay dentro de todo el equipo", subrayó Rubio.
Precisamente, esa preocupación le requiere el máximo de concentración de cara a competir de principio a fin cada partido, sin pensar en lo que pueda suceder este verano cuando se vaya a disputar el Eurobasket.
"Ahora mi mente esta sólo con la NBA", admitió Rubio. "Pero siempre es bonito jugar un europeo con la selección, aunque, repito, ahora mismo estoy centrado solo en lo que es la competición y realidad de la NBA", agregó.