Al fin salió el Sol y la Hermandad más joven de la ciudad -ha cumplido 18 años desde su erección canónica- anunció la Resurrección del Señor. Unos 100 nazarenos blancos acompañaban al Señor en su procesión por las calles de El Puerto.
La Agrupación Musical Los Polillas de Cádiz no dejó de sonar para anunciar el triunfo de la Vida sobre la muerte. Momentos especiales los vividos a la salida, como es habitual, con la interpretación de la marcha “Resucitó” entre los repiques de campanas del primer templo portuense, la Basílica Menor de Nuestra Señora de los Milagros.
Diferentes representaciones de Hermandades se sumaron al cortejo, mientras los más pequeños, revestidos de monaguillos, repartían caramelos y pequeñas fotos de Jesús Resucitado y de su Madre, Nuestra Señora de la Alegría, que tampoco procesionó este año. Es deseo de la Junta de Gobierno que vuelva a salir a las calles de El Puerto en 2019, toda vez que se van completando los ajuares y enseres del Palio.
La mañana fue luminosa, con un viento molesto pero sin inconvenientes para la Hermandad, que estrenaba la restauración de Nuestro Señor Jesucristo Resucitado, veinte años después de su hechura, y que apareció sobre el paso de misterio tallado que estrenaba canastilla, cartelas doradas y ángeles policromados, y unas potencias nuevas. Este año, además del Cirio Pascual portado por hermanos, y seña indiscutible de esta cofradía, se procesionó por primera vez con una reliquia de Santa Ángela de la Cruz, cotitular de la Hermandad.
