La Fiscalía solicita penas de seis años y seis meses de prisión a dos ciudadanos nigerianas acusadas de obligar a ejercer la prostitución a una compatriota, a quien una de ellas engañó para que viniese a España y, una vez aquí, coaccionaron ambas con ritos vudú para explotarla sexualmente en "condiciones insalubres" y pagar una supuesta deuda de 25.000 euros.
F.O. y S.A.B. habrían tenido trabajando a la víctima "a disposición de los clientes todo el día para realizar servicios sexuales" por los que cobraba diez euros que les debía entregar de manera íntegra, además de pagar por residir en el bar, "lo que hacía interminable la deuda".
El Ministerio Público atribuye a ambas la comisión de un presunto delito de trata de personas con fines de explotación sexual en concurso ideal con un delito de prostitución mientras que a F.O. le imputa, además, un supuesto delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros ya que fue ella la que habría contactado con ella para ofrecerle la posibilidad de viajar a España.
El escrito de calificación provisional, consultado por Europa Press, recoge que a principios de 2014, F.O. contactó con la víctima y le dijo que en España "había mucho trabajo y que la vida era más fácil" en Nigeria, por lo que, dada "la situación de pobreza en la que se encontraba, sin trabajo, ni medios, y con la expectativa de mejorar sus condiciones de vida", accedió a realizar dicho viaje.
Así, le costeó la travesía desde su país natal hasta Marruecos, a donde llegó en marzo de ese aunque allí perdió el contacto con su, a la postre, presunta explotadora.
Tras residir en Libia y en Italia, recuperó la comunicación en agostó de 2015 y F.O. le dijo "que tenía que viajar a Roquetas de Mar para poder trabajar, lo que así hizo para llegar en noviembre".
"Una vez en esta localidad --añade el fiscal--, la acusada le dijo que tenía que pagar 25.000 euros de deuda ejerciendo la prostitución, de forma que, dada la carencia de documentación y domicilio, sin conocer a nadie en el país ni el idioma, y sin otra posibilidad de sobrevivir, se constreñida a hacerlo".
"CONDICIONES INSALUBRES"
F.O. la habría enviado entonces al local regentado por la otra acusada, en el mismo municipio, quien sabedora de la situación en la que se encontraba, la puso a trabajar "a disposición de los clientes todo el día para realizar servicios sexuales en condiciones insalubres y cobrando en torno a diez euros por servicios, que se veía obligada a abonar a las acusadas para el pago de la deuda".
El Ministerio Público resalta el "temor" que causaba en la víctima "la realización de rituales vudú a que se había visto sometida" y el hecho de que S.A.B. le cobrara igualmente por residir en el local, "haciendo interminable dicha deuda".
Una orden de entrada y registro emitida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Roquetas de Mar en el bar permitió su liberación . En estos se hallaron 475 euros procedentes del pago de la deuda de la víctima y diversos efectos relacionados con el vudú como bolsitas "con restos biológicos de personas y textos escritos con rezos".
Al margen de las penas privativas de libertad, el fiscal interesa que se les prohíba acercarse a ella a menos de 300 metros durante 12 años y que la indemnicen, conjunta y solidariamente, con 20.000 euros. La vista oral se celebra los días 11 y 12 de julio en la Audiencia Provincial.