La Guardia Civil ha detenido a 23 personas y otras 25 están siendo investigadas por pertenecer a dos bandas dedicadas a robos con violencia e intimidación en viviendas y establecimientos públicos de las provincias de Málaga, Córdoba, Sevilla y León a los que accedían mediante alunizajes y butrones.
Los arrestados cometían la mayoría de los robos y hurtos con gran violencia y amenazaban y golpeaban a las víctimas con armas de fuego y armas blancas prohibidas, según ha informado este viernes la Guardia Civil en un comunicado.
El valor de lo robado superaba los 400.000 euros y los efectos eran enviados a Rumanía y Alemania, donde los vendían en el mercado negro.
La investigación se inició en 2018 tras producirse varios robos con el mismo método de actuación en las localidades malagueñas de Cuevas de San Marcos y Archidona que generaron alarma social en la zona.
Los detenidos, que extremaban las medidas de seguridad para evitar ser detectados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, utilizaban indistintamente el alunizaje y el butrón y usaban vehículos todo-terreno, que previamente habían sustraído, para empotrarlos contra la puerta de los establecimientos y sus escaparates.
Los objetos eran enviados en furgoneta hasta Rumanía y Alemania, mientras que el dinero en efectivo era trasladado por una mujer de la organización, que viajaba en autobús para no levantar sospechas.
La operación ha permitido esclarecer un total de 104 delitos e incautar abundante material procedente de los robos, además de 87 plantas de marihuana y materiales eléctricos y otros enseres utilizados en este tipo de plantaciones.
