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Huelva

La principal demanda de los asentamientos es el agua

Cáritas insiste en que no "se le pone solución a los asentamientos", donde lo primero que piden "es agua"

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  • Cáritas. -

La directora de Cáritas Diocesana de Huelva, Pilar Vizcaíno, ha manifestado este jueves que la entidad "está cansada" de lo que ha llamado "incidencias políticas" en torno a los asentamientos de chabolas que existen en Huelva y a los que "no se le ponen solución". En este sentido ha lamentado que la principal demanda de los trabajadores que viven en las chabolas "es agua", por delante de una vivienda digna, lo que pone en evidencia, según Vizcaíno, la situación de insalubridad y condiciones "indignas" en las que viven los trabajadores inmigrantes.

Pilar Vizcaíno, que ha presentado en rueda de prensa la memoria general de 2018 de la entidad, ha insistido en que estas personas "vienen a trabajar" y necesitan unas "condiciones mínimas y dignas para vivir que no tienen", por lo que los asentamientos "se pueden convertir en focos de exclusión" y para evitarlo se sentaron con los trabajadores, que tras ser preguntados que derechos en primer lugar querían y necesitaban que cubrieran dijeron que el agua potable.

Estas conclusiones nacen después del trabajo hecho por Cáritas como proceso de reflexión ante la realidad que miles de personas están viviendo en los asentamientos. "Un dolor y un grito con rostros de personas concretas que viven cotidianamente la vulneración de sus derechos humanos".

En ese proceso de incidencias, Cáritas ha trabajado "con la Facultad de Enfermería de Huelva, con algunos arquitectos que se han sumado voluntariamente y algún jurista", además de la entidad que ha hecho un análisis sobre la promoción de la persona y el respeto de los derechos humanos, según la doctrina social de la Iglesia, ya que "es imposible eliminar las causas estructurales de la pobreza si no sabemos que detrás de cada persona hay un derecho".

"Sin agua no podemos vivir y nuestra salud se deteriora", ha señalado, para incidir en que acaba de pasar la romería del Rocío y se ha repartido mucha agua para los peregrinos, por lo que ha puesto de relevancia el "mundo de contrastes en el que vivimos", y ha hecho un llamamiento a que este colectivo de personas precisa "una actitud mucho más fraterna" por parte de la sociedad y de las instituciones.

En este sentido, ha explicado que Cáritas ha mantenido contactos con dos ayuntamientos en cuyo territorio se ubican asentamientos ilegales, como es el caso del de Lucena del Puerto y Moguer, de los que todavía no han obtenido respuesta. Vizcaíno ha puntualizado que sabe que la situación no es fácil de resolver para las entidades municipales, pero ha pedido un esfuerzo para que empresarios y ayuntamientos "no se echen la pelota unos a otros".

MÁS DE 14.000 PERSONAS ATENDIDAS

Asimismo, la directora de Cáritas en Huelva, ha apuntado que la entidad ha atendido en 2018 a 14.091 personas, lo que supone una reducción de 3.980 personas con respecto a 2017. Este hecho se produce por un importante cambio de la forma de trabajar de Cáritas Diocesana de Huelva, en el que el asistencialismo ha dado paso a un acompañamiento integral de la persona.

En este sentido, Vizcaíno ha apuntado que Cáritas pretende ir mucho más allá de una atención primaria, centrándose en la promoción del ser humano, en acompañarlo y apoyarlo en su proceso vital, para evitar que se acostumbren a pedir, ya que son personas que "descuidan que ellos mismos valen mucho".

Asimismo, este año, el grado de participación de las Cáritas Parroquiales en la elaboración de la Memoria de Cáritas 2018 ha llegado al 88 por ciento del total, lo que hace ver el esfuerzo que están llevando a cabo los centros parroquiales "en un ejercicio de transparencia". "Hay que reconocer el trabajo de estos equipos, que hacen un esfuerzo continuo para atender a las personas más necesitadas de Huelva".

Las personas atendidas son aquellas que acuden a Cáritas, que podrían formar parte de procesos de acompañamiento y participación. Por otro lado, se cuantifican las personas beneficiadas de la labor de Cáritas Diocesana de Huelva, que son aquellas que sin acudir directamente a Cáritas se ven beneficiadas por la acción que recibe algún miembro de la familia.

Por último, se sitúan las atenciones realizadas, que suponen un aumento de las realizadas en 2017, que sumaron 108.166 en total. Esto se debe a que el trabajo con las personas atendidas se realiza de forma integral y a que la cronificación de la pobreza y de la exclusión para muchos colectivos les haga depender de entidades como Cáritas, por ello Vizcaíno ha enfatizado la "insuficiencia del empleo y de la formación" para salir de esta situación de pobreza crónica. Además, las "dificultades para acceder a una vivienda digna" también se erigen como un factor determinante a la hora de salir de la pobreza.

UN TERCIO DE LAS PERSONAS QUE PIDEN AYUDA SON MUJERES

El perfil básico de la persona que se acerca a Cáritas Diocesana de Huelva y a los centros parroquiales para recibir atención es el de una mujer española, de edad media y con familia a su cargo. Para todo este trabajo, Cáritas Diocesana de Huelva cuenta con recursos para la Acción Sociocaritativa de la Diócesis, que suman un total de 3.032.627 euros. Así, un tercio de las personas que son atendidas y que piden ayuda en Cáritas son mujeres, que es la "nueva realidad de la pobreza".

Además de este nuevo perfil, los inmigrantes, los menores extranjeros no acompañados (Menas) y "ex Menas" también son perfiles de personas atendidas en la entidad, unidos a las personas mayores, muchas de la cuales viven solas en zonas de menos población pero otras también están situándose en parroquias del centro de la capital. Con este sector de la sociedad Cáritas ha llevado a cabo un programa de acompañamiento y dinamización unido a la atención básica. Vizcaíno no ha querido olvidar a la pobreza intergeneracional, que se heredad de padres a hijos, y que también está presente en la sociedad.

En cuanto a las personas migrantes el número total de atendidos asciende a 1.308, provenientes de asentamientos chabolistas, mientras que se les ha prestado ayuda a 703 familias, que ha supuesto un beneficio para 1.685 personas. Las personas sin hogar atendidas han sido un total de 801, mientras que por motivos de empleo se han atendido a 360, que ha beneficiado a casi 1.100 personas. También se les ha prestado atención a 25 personas por problemas de salud, que han sido socorridas y acompañadas por miembros de la entidad.

RECURSOS

Desde Cáritas han querido recalcar que un gran porcentaje de los recursos, que ascienden a más de 3 millones de euros, provienen de las aportaciones directas de la comunidad cristiana onubense a través de campañas, colectas y acciones puntuales promovidas por la Iglesia de Huelva.

Estos recursos se distribuyen entre familia, acogida y asistencia (40 por ciento), exclusión (32 por ciento), empleo (once por ciento) y los servicios diocesanos, comunicación y formación y animación comunitaria que suponen un doce por ciento.

Una labor importante la desarrollan los voluntarios que participan en Cáritas Diocesana de Huelva, ya sea en la atención en parroquias o en los distintos centros ubicados en las instalaciones de la calle Doctor Cantero Cuadrado, sin los cuales sería imposible llevar esta labor. En total, 800 voluntarios han participado en la acción en el año 2018. A ello hay que añadir que el 96 por ciento de las 830 personas que trabajan en Cáritas.

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