La Guardia Civil, en el marco de una operación contra el robo en viviendas utilizando técnicas paramilitares, ha detenido a tres albaneses como presuntos autores de 13 robos con fuerza en casas de las localidades cántabras de Bárcena de Cicero, Junta de Voto y Güemes, e investiga una treintena de hechos similares en el País Vasco.
Según ha informado hoy el instituto armado, los detenidos tienen relación con los grupos de inmigración irregular desde los puertos de Bilbao y Santander. Se trata de K.C., E.P y A.M., dos de ellos de 23 años y otro de 25, que residían en una habitación realquilada en Barakaldo (Vizcaya). Durante el día estaban establecidos entre los grupos de origen albanés que merodean por los alrededores del puerto de Bilbao y han sido identificados el interior del mismo.
A media tarde, los tres jóvenes se reunían para dirigirse a zonas aisladas y supuestamente perpetrar robos en viviendas. No discriminaban si estaban habitadas o no, si bien no se han constatado casos de violencia.
Dentro de los intercambios de información que mantiene la Guardia Civil con la Policía Autonómica del País Vasca-Ertzaintza, ambos cuerpos venían investigando a un grupo organizado compuesto por jóvenes albaneses relacionados con la inmigración irregular para acceder hasta el Reino Unido desde los puertos de Bilbao o Santander, y que a la vez podían dedicarse a otros delitos como el robo en viviendas.
A finales de septiembre se cometieron seis robos en interior de viviendas situadas en las localidades cántabras de Bárcena de Cicero y la Junta de Voto, así como otros siete en Güemes, en el municipio de Bareyo.
Estos robos se perpetraron a primeras horas del día o en la tarde noche, aprovechando la oscuridad. En el momento del robo no había nadie en la mayor parte de las viviendas, aunque sí había gente en el interior en dos casos, en los que, al verse descubiertos, los autores huyeron sin realizar acciones violentas.
Las investigaciones revelaron que los jóvenes eran trasladados a zonas aisladas de Cantabria y País Vasco en las que había chalets. Les abandonaban de noche, en pleno monte y quedaban a la intemperie. Utilizaban ropas adecuadas para mimetizarse en el bosque y evitar ser detectados.
Cuando llegaban a las viviendas se apoderaban tanto de efectos de escaso valor como de joyas, dinero y elementos electrónicos. Al amanecer eran recogidos y trasladados a su lugar de alojamiento con el correspondiente botín logrado durante la noche.
A finales de octubre la Guardia Civil desplegó un operativo en Barakaldo, detuvo a los tres jóvenes y los puso a disposición del Juzgado de Santoña.
Se han intervenido diferentes efectos procedentes de los robos, ropas de camuflaje y otros vestigios que están siendo analizados conjuntamente con la Policía Autonómica del País Vasco, por lo que no se descarta el esclarecimiento de otra treintena de robos en esa Comunidad Autónoma e incluso alguna otra detención.
Esta operación ha sido desarrollada por la Guardia Civil de Cantabria, apoyada por efectivos de la de Vizcaya, componentes del Grupo de Acción Rápida (GAR) y la colaboración de la Policía Autonómica del País Vasco.