El peaje en la autopista AP-4 entre Sevilla y Cádiz ha dejado de funcionar a las 20.30 horas de este 31 de diciembre, cuando se han levantado definitivamente sus barreras, tras iniciarse la concesión de la vía en 1969 y mantenerse durante 50 años mediante sucesivas prórrogas.
Aunque estaba previsto que las barreras se levantasen a las cero horas del 1 de enero, finalmente ha sido a las ocho y media de la tarde cuando se ha abierto la carretera libremente, ya que la empresa adjudicataria lo ha comunicado al Gobierno central con el fin de que sus trabajadores no tengan que estar en esta noche en concreto en sus puestos, y puedan despedir el año con sus familias.
La apertura de la carretera ha sido vivida como una fiesta por los vecinos de Los Palacios y Villafranca (Sevilla), que se han reunido en buen número en el peaje de su pueblo para festejarlo, tras pedirlo en sus redes sociales el alcalde, Juan Manuel Valle, que ha vivido junto a ellos ·un momento histórico·.
La circulación libre en la AP-4 supondrá un ahorro anual para los usuarios de 80 millones de euros, teniendo en cuenta los casi 30.000 vehículos que recorren a diario sus 93 kilómetros, aunque se espera que ahora aumente en un 30 % el tráfico en esa vía, que se encargarán de conservar 42 de los 71 trabajadores de la actual concesionaria mediante un nuevo contrato.
Tras la supresión del peaje esta tarde, se irá realizando de forma progresiva el desmantelamiento de las instalaciones de las cabinas y barreras, sin plazo concreto para ello.
La concesión para la construcción, conservación y explotación de la autopista AP-4 fue adjudicada en el año 1969, y el compromiso del Gobierno es que las concesiones cuyo plazo acabe en esta legislatura no se van a prorrogar ni a volver a licitar, de forma que la gestión de las infraestructuras pasará a corresponder directamente a la Administración General del Estado y no a concesionarias privadas.
Además del contrato para el mantenimiento de la AP-4, se ha licitado también la conservación y explotación de las tres áreas de servicio entre Sevilla y Cádiz a través de un contrato de concesión de servicios dividido en tres lotes.