La orden de calendario escolar del próximo curso 2020-2021 prohibirá por primera vez los deberes en vacaciones, así como que haya exámenes en la semana posterior a estos descansos. Además, garantizará la atención a los alumnos hasta las 14.00 horas, así como los servicios de comedor y transporte escolar, en los meses de junio y septiembre, de horario reducido.
Se trata de las principales novedades del borrador de orden de calendario escolar que ha presentado hoy la consejera de Educación, Marina Lombó, a la Junta de Personal Docente. Una propuesta continuista, con 175 días lectivos divididos en bimestres, que, salvo flecos en un periodo no lectivo, respaldan los sindicatos, que hoy mismo presentarán su propia alternativa a la Administración con el fin de "zanjar el tema lo antes posible".
"Mientras sea una propuesta continuista con lo que hemos hecho hasta ahora, lo aceptaremos", ha asegurado al término de la reunión la presidenta de la Junta de Personal Docente, Belén González, que ha apuntado que la alegación sindical contempla un "ajuste de fechas" en uno de los descansos para adaptarlo a los bimestres con una semana completa de descanso.
Por su parte la consejera ha explicado que hoy se ha celebrado una primera mesa técnica "cordial y positiva" en la que su departamento ha entregado un borrador del calendario a la Junta de Personal Docente. En él, se mantienen los cinco periodos lectivos, pero se introduce una novedad "totalmente necesaria" como es que durante el periodo de descanso los niños no tendrán deberes escolares, y habrá de transcurrir una semana "como mínimo" para las evaluaciones.
Unas cuestiones que recogerá la orden del calendario con el fin de que "el periodo de descanso sea realmente de descanso", ha apostillado Lombó. En este sentido, aunque la Consejería recomendó este curso no poner tarea durante los descansos escolares, no será hasta el próximo año cuando esta medida sea de obligado cumplimiento para todos los centros de la comunidad autónoma.
Otra medida "importante para los alumnos y las familias" es que en junio y septiembre los colegios permanecerán abiertos hasta las 14.00 horas, es decir, se impartirán las cuatro horas lectivas y se ofrecerá la posibilidad de que los niños puedan permanecer en el centro con servicios complementarios. También se garantiza el comedor y el transporte escolar.
Lombó ha destacado que estas novedades plantadas por la Consejería se plantean para cumplir el objetivo de la "adecuada atención de los alumnos" y de las condiciones laborales de los docentes. "Concilian la parte de condiciones laborales de los docentes con medidas de conciliación de la vida laboral", ha destacado.
El calendario contempla 175 días lectivos de obligado cumplimiento y también se recogerá en la orden que los festivos locales que caigan en día de colegio se recuperen a lo largo del curso.
Las sugerencias a este borrador que presente la Junta de Personal Docente se abordarán en la mesa sectorial que se celebrará la próxima semana, en la que se intentará "cerrar" el calendario escolar para el próximo curso.
JUNTA DE PERSONAL
Por su parte, la presidenta de la Junta de Personal Docente ha explicado que los sindicatos quieren un calendario bimestral porque "ha funcionado bien" y porque la comunidad educativa "lo ha asumido". También abogan por un "reparto equitativo" entre tiempo de trabajo y de descanso, así como que los periodos de vacaciones sean "semanas completas", cuestión que no se cumple en uno de los cierres bimestrales, al que la Junta presentará una alternativa.
La Junta presentará esta mañana su propuesta a la Consejería porque quiere "dejarlo cerrado" ya que anteriormente el calendario escolar "ha creado conflicto".
LOMLOE
Por otra parte, a preguntas de la prensa sobre el proyecto de Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE), la consejera lo ha valorado de forma "positiva en líneas generales" aunque ha recordado que aún "queda mucho recorrido para su implantación".
"Creo que es una ley necesaria y que puede aportar beneficio a la educación; ahora, lo importante es su desarrollo posterior", ha señalado.
Lombó ha opinado que la "controversia" que generó la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) "no ha sido muy positiva" y ha subrayado que "si educación necesita algo es de normas estables que perduren en el tiempo y que sean con un consenso".
En este sentido ha matizado que el actual "no es el mejor momento político por la cantidad de grupos que van a opinar", pero el proyecto tiene "factores muy importantes", como la extensión de la educación temprana de 0 a 3 años, en la que Cantabria "ha sido pionera"; o la "apuesta importante" por la diversidad, donde esta comunidad autónoma cuenta con numerosos proyectos y programas.
También ha destacado la consejera la relevancia que da la ley al bilingüismo y la "apuesta importante" por la Formación Profesional, "necesaria" a su parecer porque la "lentitud de modificación de currículos hacía que la oferta formativa no fuera acompasada con el sector productivo".
Preguntada por la intención de Unidas Podemos de retirar conciertos a los centros que segregen por sexos, como es el caso del Peñalabra y Torrevelo en Cantabria, Lombó ha recordado que el Tribunal Constitucional ya se pronunció al respecto "y no sé cómo se va a conjugar el texto de la ley con las sentencias; tendremos que esperar para pronunciarnos".