El Vaticano ha pedido formalmente al Gobierno italiano que modifique el proyecto de ley contra la homofobia y transfobia que está siendo examinado actualmente en el Senado, pues considera que en algunos de sus pasajes podría violar el Concordato, al acuerdo que regula las relaciones entre Iglesia y Estado, revela hoy "Il Corriere della sera".
La petición, formulada mediante una "nota verbal" presentada por el secretario de Relaciones con los Estados, Paul Richard Gallagher, el pasado jueves en la Embajada italiana ante la Santa Sede, es un hecho sin precedentes en la historia de las relaciones entre Italia y el Vaticano, que nunca hasta ahora había intervenido durante el trámite para la aprobación de una ley italiana, según el diario.
"Algunos contenidos actuales de la propuesta legislativa que se está examinando en el Senado reducen la libertad garantizada a la Iglesia Católica por el artículo 2, párrafos 1 y 3 del acuerdo de revisión del Concordato", se lee en el texto.
Los párrafos mencionados se refieren a la "libertad de organización, de público ejercicio de culto, de ejercicio de magisterio y del ministerio episcopal" y a la garantía "a los católicos y sus asociaciones y organizaciones la plena libertad de reunión y manifestación del pensamiento con la palabra, los escritos y cualquier otro medio de difusión", explica el medio.
Entre las cuestiones planteadas figura que las escuelas católicas privadas no estarían exentas de organizar actividades durante la futura Jornada Nacional contra la Homofobia, pero también temor por la "libertad de pensamiento" de los católicos y por las posibles consecuencias judiciales. "Pedimos que se tengan en cuenta nuestras preocupaciones", escribe la Santa Sede al Gobierno italiano, añade "Il Corriere della sera".
El proyecto de ley contra la homofobia y la transfobia impulsado por el diputado del Partido Demócrata (PD) Alessandro Zan se aprobó en la Cámara de los Diputados con 265 votos a favor y 193 en contra el pasado 4 de noviembre. Desde entonces espera la luz verde del Senado por la feroz oposición de la derecha y la ultraderecha.
"Siempre hemos estado a favor de unas normas muy estrictas contra la homotransfobia, y seguimos estando a favor de estas normas y del proyecto de ley Zan, pero siempre hemos estado abiertos a la discusión en el Parlamento y vamos a estarlo ante los problemas legales", aseguró hoy Enrico Letta, secretario del PD, principal formación progresista italiana, tras revelarse la petición del Vaticano.