No. No puede haber mayor tópico periodístico el día de unas elecciones como las del 19J en Andalucía. La fiesta de la democracia, escucharemos en crónicas televisivas y radiofónicas, describiendo que todo va bien, que los comicios avanzan con normalidad. Fiesta de la democracia es a unas elecciones lo que los Globos de Oro, antesala de los Oscar, al cine; los atascos monumentales, al tráfico; o las espadas, en todo lo alto, al fútbol.
Seguro que las crónicas también hablarán de unas elecciones históricas, como lo han sido las diez anteriores. En cualquier caso, el cliché, el estereotipo no puede ocultar la importancia de lo que acontecerá en las próximas horas. La comunidad autónoma más grande de España, en número de habitantes y otros muchos parámetros, se juega los cuartos de su futuro inmediato postpandémico, abriendo un ciclo electoral en España al que seguirán municipales, autonómicas y generales en 2023. Ahí es nada.
Pocas veces unas andaluzas han tenido una vertiente nacional. Los medios de comunicación de ámbito estatal han puesto el foco, y de qué manera, en los candidatos a la Presidencia de la Junta y el desparpajo (o no) de estos en los dos debates celebrados. La participación será de las primeras incógnitas a despejar. Los andaluces darían un gran ejemplo, uno más, si acuden en masa (aquí tenemos otro bonito tópico) a los colegios electorales el próximo domingo. El objetivo será superar el pírrico 58,65%, que fue la participación en 2018, cuando una gran parte del electorado del PSOE prefirió ir al campo a coger setas antes que introducir la papeleta en la urna. Todo lo que no sea superar esa cifra será un fiasco.
Otra de las claves será saber si Juanma Moreno superará el techo de 50 escaños conseguido por Javier Arenas en 2012, cuando ganó pero no pudo gobernar. Hasta qué punto llegará el desplome de Cs y el incremento de Vox con Olona serán otras materias objeto de politólogos, aunque la madre del cordero estará en lo que pase en el PSOE, partido hegemónico en Andalucía durante casi cuatro décadas, que puede afrontar una dura travesía del desierto, aunque cuando llegue ese río cruzaremos ese puente.
