Una juez de Almería ha condenado a tres años y medio de prisión a un hombre que, bajo los efectos de sustancias estupefacientes, huyó de un control de tráfico "a gran velocidad" en la carretera AL-4301 que va desde la A-7 a Guardias Viejas en El Ejido (Almería), de modo que durante su recorrido embistió contra varios agentes y colisionó contra un invernadero.
La sentencia, consultada por Europa Press y dictada en firme tras la conformidad de las partes, condena al acusado por dos delitos contra la seguridad vial, un delito de atentado contra agentes de la autoridad y dos delitos leves de lesiones, por los que además le impone ocho meses de multa a razón de tres euros diarios y le priva del derecho de conducir durante un año.
El acusado, quien además deberá pagar una indemnización 4.482 euros por los desperfectos efectuados al vehículo policial contra el que impactó, circulaba por la carretera sobre las 15,45 horas del pasado 2 de enero tras haber consumido estupefacientes cuando se aproximó a un control de vehículos montado por la Guardia Civil.
Los agentes, que observaron que el vehículo carecía del distinto de haber superado la ITV, hicieron indicaciones al conductor para que detuviera la marcha, ante lo cual, el acusado "aceleró de forma brusca" y "atravesó el control", por lo que uno de los guardias civiles tuvo que apartarse de la vía para no ser atropellado.
Así, el acusado emprendió la huida durante unos cuatro kilómetros por los que "circuló a gran velocidad, invadiendo ambas direcciones y llevando a cabo cambios bruscos de dirección", con los que obligó al resto de vehículos que circulaban "a detenerse y apartarse para no colisionar".
En un momento dado, el hombre perdió el control del vehículo y colisionó con un invernadero, en el que creó desperfectos ante los que el dueño finalmente no ha reclamado. Encontrándose sin salida y con el vehículo policial tras él, el acusado "aceleró de forma brusca marcha atrás" y "embistió" contra el coche patrulla "con enorme fuerza".
A causa del impacto, no solo provocó daños en el vehículo oficial, sino también lesiones en las cervicales a la pareja de agentes que iba en su interior, quienes finalmente consiguieron reducir al acusado y detenerlo.
La juez, que para aplicar las penas tuvo en cuenta la circunstancia atenuante de intoxicación por consumo de estupefacientes al acreditarse que el acusado está bajo tratamiento para deshabituación, accedió a la suspensión de las penas privativas de libertad durante cuatro años con la condición de que el acusado no vuelva a delinquir en ese periodo de tiempo.
