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Almería

Intervenidas 6.000 plantas de cannabis y 220 kilos de cogollos en Níjar

El propietario de la finca había realizado el alta de la explotación ante la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible

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  • Plantación de cáñamo intervenida por la Guardia Civil en Níjar. -

La Guardia Civil de Almería ha intervenido 6.000 plantas de cannabis y 220 kilos de cogollo en una finca dedicada al cultivo de cáñamo y ha detenido a su responsable como presunto autor de un delito contra la salud pública.

El propietario de la finca había realizado el alta de la explotación ante la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, pero el cultivo no estaba dedicado exclusivamente a producción de cáñamo industrial --fibra o semillas-- ya que los agentes constataron que se manipulaban y comercializaban los cogollos.

Asimismo, según ha informado la Comandancia, no poseía autorización de la Agencia Española del Medicamento para otro uso de los contemplados en este tipo de cultivo.

La operación 'Vergeles' se inició cuando, al llegar a la finca invernada situada en término municipal de Níjar (Almería), los agentes observaron como al terreno de cultivo le precedía un muelle de carga donde localizaron un manto de plástico cubierto de cogollos de cánnabis.

En un almacén empleado como secadero descubrieron también plantas de marihuana en proceso de secado y útiles de corte, restos de ramas a las que se le ha arrancado cogollo y hoja, y cajas conteniendo únicamente cogollos.

Al pasar a la zona de cultivo los agentes contabilizaron un total de 5972 plantas de cánnabis que habían sido arrancadas y colgadas del revés en los alambres para su secado.

El cultivo de cáñamo está permitido bien si es destinado exclusivamente a fines industriales, es decir, aquellos cuyo destino sea la producción de fibra o semillas, o si con autorización expresa de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) se destina a fines científicos, médicos o de investigación.

Sin embargo, tras la inspección de la finca, los agentes determinaron que no se daba ninguno de los supuestos permitidos, ya que se había separado los cogollos de la planta.

De igual modo, localizaron una caravana a la que se habrían anexado unas chapas construyendo así otro pequeño almacén y en cuyo interior se descubrieron cajas de plástico que almacenaban cogollos de cánnabis.

Por todo lo anterior, se procede a la detención del responsable del cultivo como presunto autor de un supuesto delito contra la salud pública por el que el juez instructor en funciones de guardia ha decretado su ingreso en prisión.

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