El argumento de un purista de las empanadas argentinas se desmonta fácilmente teniendo en cuenta que se trata de un bocado con una historia bastante reciente.
Hasta ahora la conocíamos de carne picada, pero sus posibilidades son ilimitadas. De hecho, en los cinco locales de La Empanadería Argentina la que más se vende es la de guiso de rabo de toro, un producto que en las carnicerías de Argentina los clientes se llevan para sus mascotas.
De pollo al curry, asado criollo, espinacas y queso, de alitas picantes o de pollo bbq. Las hay para todos los gustos, pero a diferencia de otros locales, no hay dos empanadas diferentes en cuanto a la masa y al generoso grosor del relleno. Eso lo llevan a rajatabla.
Con su artífice, Diego Percivaldi, nos hemos citado en uno de los locales. Nos ha desvelado su fórmula de negocio, pero también la historia que les trajo hasta Cádiz en plena pandemia tras vender sus dos restaurantes en Argentina y recorrer miles de kilómetros en autocaravana junto a su mujer, Cecilia Oliver, y sus tres hijos
