Hungría ha levantado 754 kilómetros de diques temporales a lo largo del Danubio, anticipando que el río puede alcanzar en los próximos días niveles cercanos a las crecidas de 2013, cuando se desbordó, informaron este viernes las autoridades del país centroeuropeo.
La longitud total de las obras de defensa han alcanzado esta mañana los 754 kilómetros, aumentando el nivel de protección al más alto, el tercer grado, a lo largo de 114 kilómetros.
Las "riadas de la década" en el mayor río de Hungría que baja crecido desde Austria y Eslovaquia llegan este viernes a ciudades como Komárom y Esztergom, donde las autoridades locales dicen haberse preparado al menos "al 99 %".
"La situación es seria pero no hay por qué precipitarse, hay tranquilidad en todas partes", aseguró esta mañana el primer ministro, el ultranacionalista Viktor Orbán, al informar a la prensa.
Según Orbán, Hungría "tendrá que soportar los próximos 6 días" la crecida, para cuando se pronostica que el caudal del Danubio abandone el país hacia el sur.
En las obras de defensa actualmente trabajan más de 6.000 personas, entre ellas más de 2.700 son voluntarios.
Kisoroszi, localidad en el norte de la isla danubiana de Szentedre, sigue aislada, mientras que en Esztergom y otros poblados el río ha inundado barrios de casas vacacionales.
En Budapest el alcalde progresista, Gergely Karácsony, aseguró en la red social Facebook que la ciudad está preparada para hacer frente no solo a los máximos pronosticados de 850 centímetros, sino que soportará hasta los 900 centímetros.
"Hasta ahora todo va según lo previsto, pero lo difícil está por llegar", agregó Karácsony, aludiendo a que se prevé que el río alcance su altura máxima el sábado por la tarde.
En la ciudad varias líneas del transporte urbano se vieron afectadas y también se han cerrado al tráfico calles, paseos y avenidas cercanas al río.
El metro 2 de la capital húngara no para en la plaza Batthyány, que se sitúa junto al Danubio.
Mientras, en el noroeste del país las autoridades ya han registrado la disminución de alturas de ríos como el Leita, que han amenazado con inundar varias localidades, algo que finalmente no sucedió.
Por otra parte, los servicios de meteorología prevén para los próximos días jornadas soleadas y sin lluvias en todo el país.