Micaela Flores Amaya, conocida artísticamente como 'La Chunga', fallecía el pasado viernes a los 87 años de edad debido a problemas pulmonares. Su propio hijo, Luis Gonzalvo, aseguraba que su madre llevaba días "entrando y salido del hospital" debido a que "ha habido un progreso largo de una enfermedad".
Europa Press ha rescatado de su archivo multimedia una de las últimas imágenes de la artista. En ellas hablaba abiertamente sobre la batalla que había ganado al cáncer: "Soy la mujer más feliz del mundo".
La bailaora acudía en el 2016 a la exposición de la Fundación Isabel Gemio, en la que exponía un cuadro pintado por ella, y pudo decir bien alto que había superado el cáncer que padecía después de cinco años de lucha: "Me han dejado por los suelos, pero estoy aquí y con otro espíritu".
Además, aprovechaba la presencia de las cámaras para mandar un mensaje de esperanza para que nadie se rinda ante esta enfermedad: "Luchad porque ese bicho de su madre se va".
Una lucha que no llevó a cabo de manera solitaria, ya que se mostraba completamente agradecida con su hermana y su cuñado por no haberla dejado sola "ni un momento" y a toda la gente que ha estado a su lado: "He tenido alrededor unas personas para comerles el corazón".
El frenesí que 'La Chunga' transmitía con su baile llamó la atención del pintor Salvador Dalí, quien le propuso una obra muy especial, un lienzo que dispone en el piso sobre el que deja varios tubos de pintura. Al son de la guitarra de Ramón Gómez, 'La Chunga' bailó descalza sobre la tela extendiendo el color y creando así un nuevo arte, la pintura con los pies.
'La Chunga' expuso sus obras en ciudades españolas como Madrid aunque también a nivel europeo en capitales como París. Tras su debuto, en los años 60 recorriendo la Costa Brava, además de sus viajes al extranjero, es cuando se convierte en uno de los rostros de los tablaos flamencos más conocidos a nivel nacional e internacional durante más de 20 años.
