Nunca en esta temporada un empate supo a tan poco. La Real Balompédica Linense perdió dos puntos, más que sumar uno, en su compromiso en casa ante un rival, el Xerez DFC, que ofreció mucha garra pero muy poquito fútbol en el Ciudad de La Línea. Los linenses siguen sin acertar en su feudo, lo que está costando muchos puntos que, a la postre, se están mostrando como fundamentales para asegurar la permanencia en un grupo IV en el que la Balona debería ir mucho más arriba por calidad y plantilla, pero a la que su indolencia en momentos clave les está costando la tranquilidad esta temporada. Empezó muy bien el partido para los linenses con dominio claro sobre su rival y algunas ocasiones, como un disparo desde la frontal de Fran Carbía en el minuto 12 que asustó a los visitantes.
Sin embargo, sería el Xerez el que golpearía primero en una jugada que se cimentó desde la banda izquierda, la única desde la que los visitantes inquietaron al equipo local en los primeros compases del partido. Un centro de Abraham Gómez que resultó en un derribo en el centro del área que el colegiado sancionó con penalti. Si bien Álex Lázaro despejó el lanzamiento en primera instancia, el rechace fue aprovechado por Sergio García, que calentó, además, a la grada pidiendo que se callara. Mal gesto del jugador visitante.
A partir de ahí, la Balona entró en shock y su rival aprovechó para enlazar sus mejores minutos, pero su mayor empuje no se tradujo en ocasiones claras. Fue la Balona la que, al filo del descanso, empató por mediación de Joao Pedro, quien solo tuvo que meter la puntita tras el pase de la muerte de Fran Carbía, que a su vez había recogido el esférico tras peinar Moha un buen centro.
La segunda parte apenas tuvo historia. Muy poco fútbol y muchas imprecisiones por parte de ambos equipos. Harper pidió penalti en el 79 y cayó lesionado. La entrada de Pellecín y Fuentes por éste y por Carbía pareció dar algo más de empuje, pero el marcador ya no se movió. Pese a todo, la Balona sigue fuera del descenso.