Polémica arbitral en la derrota de la Real Balompédica Linense en Murcia (3-0). La expulsión de Luis Martínez por doble amarilla en el minuto 67, al parecer por protestar, con 0-0 en el marcador marcó un punto de inflexión indudable en un partido desmoronando el esquema del conjunto visitante y propiciando un vendaval ofensivo por parte del UCAM que fue imposible de repeler por parte de los linenses, los cuales encajaron tres tantos en apenas 20 minutos.
Hasta ese fatídico momento, cualquiera de los dos equipos podía haberse hecho con los tres puntos. La igualdad marcó un encuentro en el que los linenses supieron tener paciencia, tras un comienzo dubitativo con dominio local, y en el que los blanquinegros esperaban imponerse a los puntos por desgaste e impaciencia de un rival que no encontraba la manera de doblegar a los visitantes.
La primera parte apenas tuvo historia. El dominio inicial del UCAM dio paso a alternativas en el control de la posesión sin apenas oportunidades reseñables por parte de ninguno de los dos equipos, salvando, quizás, un lanzamiento esquinado de Fran Carbía a los 10 minutos que se marchó fuera por el lateral y un disparo que se marchó alto del local Álex Bueno.
En la reanudación, más de lo mismo hasta que el UCAM se decidió a lanzarse a la ofensiva con tres cambios a la vez. Entraban a los 62 minutos Rubén del Campo, Julito y Alexis García sustituyendo a Amin, Álex Gompi y Albert Luque. Parecía que los locales se anticipaban a lo que iba a pasar, pues esta apuesta ofensiva le vino de perlas al UCAM con la expulsión de Luis Martínez apenas cinco minutos después.
A partir de ahí, la Balona se desarboló. En el minuto 73, el UCAM abría la cuenta por mediación de Ale Marín, tras rematar un centro. Rubén del Campo abría distancias en el 81 con un disparo cruzado certero y, tres minutos después, un error de David Hernández al sacar una falta propició el 3-0, de nuevo de Rubén Campo, que se marchó, así, con un doblete tras completar una contra perfecta de los locales.
Sigue la Balona sin levantar cabeza y se complica esta temporada tan irregular de los linenses.