España ha alcanzado un récord histórico en la cofinanciación nacional del programa Erasmus+ elevando la cifra a 72,5 millones de euros, una inversión nunca antes alcanzada en estas becas estudiantiles y que permitirá que más de 55.000 estudiantes puedan beneficiarse del programa, según recoge el informe presentado por Erasmus Student Network (ESN) España en la VI edición de su Observatorio de Cofinanciación de Becas Erasmus+.
Eso sí, el estudio pone en evidencia tanto el avance de la movilidad de los estudiantes como las desigualdades persistentes en el acceso a las becas entre las diferentes comunidades autónomas que genera un "acceso desigual a las oportunidades", recoge el documento.
REPARTO POR COMUNIDADES AUTÓNOMAS
Por comunidades, el informe revela que Andalucía lidera la financiación del programa Erasmus+ en España con un presupuesto de 12,15 millones de euros en 2025, una cifra que supera a muchas otras comunidades y que está destinada a más de 10.000 estudiantes.
En este caso, la región andaluza ha establecido un modelo de financiación que tiene en cuenta varios factores, como la duración de la movilidad, la situación socioeconómica del estudiante y el país de destino, "lo que lo convierte en uno de los más completos y equitativos del país", recoge el informe.
Asimismo, destacan la Comunidad de Madrid y Castilla y León por sus aumentos de financiación. En el caso de la primera en 2024 no ofrecía ningún tipo de confinanciación pero en 2025 destinará dos millones de euros a este programa, mientras que en la segunda aumentará su presupuesto un 15%, que se traduce en 150.000 euros más.
Aragón destina 600.000 euros a este programa y divide las ayudas en tres grupos que van desde un máximo de 350 euros al mes hasta 250 euros al mes con un número de nueve meses máximos cubiertos, una cantidad que desde ESN ven "insuficiente para cubrir la demanda del estudiantado internacional, el modelo aragonés no tendrá la capacidad de generar un sistema justo y accesible".
Cataluña ofrece becas de movilidad internacional a estudiantes universitarios de Cataluña que participan en programas de intercambio en el extranjero. Estas becas tienen un valor fijo de 200 euros mensuales por un período máximo de seis meses (totalizando 1.200 euros por estancia), y se aplican sin importar el país de destino.
Por su parte, la Comunitat Valenciana ha vuelto a aumentar el número máximo de meses que se puede recibir la ayuda, puesto que en la convocatoria del curso anterior (2022/2023) se había reducido de nueve a 5 meses. El monto de esta ayuda varía según el país de destino, clasificándolos en tres grupos de ingresos establecidos por el programa Erasmus+: el primer grupo recibe un suplemento de 310 euros por mes, el segundo 260 euros por mes y el tercero 210 euros por mes.
Extremadura también ofrece una ayuda de movilidad de 200 euros mensuales, con una duración máxima de 7 meses, lo que equivale a un total máximo de 1.400 euros, sin embargo, ESN anima a la región a que esta ayuda sea repartida teniendo en cuenta la situación socioeconómica del estudiante, así como el nivel de vida del país de destino.
En Galicia la cuantía de la beca varía según el país de destino. A su vez la movilidad puede tener una duración máxima de nueve meses y el reparto se realiza por grupos que va de un máximo de 195 euros a 125 euros mensuales.
Por otro lado, Islas Baleares, a pesar de haber duplicado su presupuesto y pasar a los 100.000 euros, sigue siendo una de las regiones con menor dotación, algo que "resulta completamente insuficiente en comparación con otras autonomías", explica ESN.
CL-M, CANTABRIA Y CEUTA, FUERA DE LA COFINANCIACIÓN
Los autores del informe señalan además la conveniencia de contar con un sistema de ayudas que se adapte a la duración de la estancia y al coste de vida del país de destino, como siguen Andalucía, Aragón, Galicia y la Comunidad Valenciana, aunque esta última otorga las becas según el rendimiento académico. No obstante, en Extremadura y Murcia es donde hay mayor falta de fondos y donde los modelos de ayudas "limitan las oportunidades para los estudiantes".
Por su parte, Asturias ofrece un complemento de ayuda al programa Erasmus+, equivalente a 200 euros mensuales para una estancia máxima de 9 meses, con un máximo de 1.800 euros por ayuda.
En cuanto a la Región de Murcia el presupuesto destinado a las Becas Erasmus+ ha caído de 418.400 euros en 2024 a 219.150 euros en 2025, lo que representa un "recorte alarmante" del 50%, ha destacado ESN, aportando solo 50 euros mensuales por estudiante.
En el caso de Navarra, fija una ayuda de 100 euros al mes y 25 euros por cada una de las semanas que resten hasta finalizar el periodo justificado con un máximo de 9 meses.
El País Vasco proporciona ayudas complementarias variables a la movilidad en función de: si se trata de una beca Erasmus+ con financiación por parte del SEPIE, en cuyo caso la ayuda será aquella necesaria para alcanzar los 390 euros mensuales en caso de no llegar a ellos; si se trata de una beca de movilidad Erasmus+ sin la financiación otorgada por el SEPIE, entonces la ayuda es de 390 euros por cada mes no financiado. En cualquier caso, la ayuda es para un máximo de nueve meses.
El Gobierno de La Rioja tiene un acuerdo de colaboración con la Universidad de La Rioja, mediante el cual los estudiantes de esta institución pueden obtener una ayuda extra única financiada con fondos autonómicos, que equivale a alrededor de 500 euros por semestre.
En cuanto a Canarias, el archipiélago convocaba ayudas complementarias para la financiación del programa Erasmus+ en el pasado, pero decidió prescindir de ellas a partir del curso 2012/2013. Sin embargo, sí que existen convocatorias de ayudas complementarias por parte de casi todos los Cabildos de las islas.
Melilla ofrece una ayuda que se ha mantenido constante a lo largo de los tres años, de 100 euros al mes durante la duración de la movilidad, con un máximo de 900 euros, es decir, de nueve meses.
Por el contrario, Castilla-La Mancha, Cantabria y Ceuta permanecen fuera del sistema de cofinanciación del programa.
OTROS CONSEJOS PARA LA EQUIDAD
Para que las ayudas sean más equitativas, el Observatorio propone ajustar las ayudas según el país de destino, modelo que ya siguen algunas comunidades, como Andalucía, Comunidad Valenciana o Aragón, algo que permite una mayor equidad entre estudiantes que se desplazan a países con diferentes costes de vida.
Así, ponen de ejemplo a comunidades como Asturias y Andalucía en tanto que incluyen el criterio de priorización de estudiantes de familias con menos recursos, y se recomienda su implementación en otras regiones.
También destacan que algunas comunidades como Andalucía y Asturias ofrecen ayudas por un máximo de nueve meses, mientras que otras, como Comunidad Valenciana, reducen esto a cinco meses, lo que limita las posibilidades de los estudiantes.
Por otra parte, se recomienda el pago anticipado de las ayudas, y que así el estudiantado pueda hacer uso de la beca durante su estancia, ya que el retraso en el pago sigue siendo una barrera importante para los estudiantes, que a menudo necesitan esos fondos antes de iniciar su movilidad.
Finalmente, el secretario de Estado de Juventud e Infancia, Rubén Pérez, que ha asistido a la presentación del informe, ha señalado que dialogarán con las CCAA la armonización de criterios para que todos los territorios tengan las mismas capacidades y los mismos recursos y, sobre todo, que "no exista una brecha económica". "Debemos ayudar a los jóvenes que están en situaciones socioeconómicas más desfavorables para que no tengan que renunciar a una beca Erasmus+", ha sostenido Pérez durante su intervención.
