Además, España dejó pasar una buena oportunidad de conseguir ya una plaza olímpica en Londres, pues entran los tres primeros y Serbia por ser campeona de la Liga Mundial.
Los hombres que dirige Rafa Aguilar solo marcaron dos goles en el segundo tiempo, mediante Fran Fernández y Vallés, y éste último con el encuentro decidido. El parcial de 5-2, con un gran partido del guardameta Tempesti, hundió a los españoles.
Figlioli fue el máximo goleador con cuatro tantos, mientras que en España ningún jugador fue capaz de meter dos goles.
El partido comenzó muy igualado con errores por ambos lados, pero los primeros ocho minutos se decantaron para los transalpinos (2-1) con goles de Felugo y Figlioli, por uno de Español aprovechando una superioridad.
España supo jugar el hombre de más en el segundo cuarto. Sin embargo, los italianos se pusieron dos arriba (5-3) y tuvieron una superioridad para ponerse seis arriba. El balón de Giorgetti salió alto y Mario García culminó la mejor jugada del equipo de Aguilar cuando llegaba el descanso para ponerse a uno (5-4)
Italia mejoró en la vuelta al agua, sobre todo en defensa, mucho más intensa y agresiva que la española, alejando a los lanzadores españoles y con un portero, Tempesti, de 2.05, comiéndoles la moral a los hispanos.
Fran Fernádez cerró con el quinto gol, también con un hombre de más, cinco minutos sin marcar tras tres goles "azzurri" de Figlioli, Gallo y Aicardi (8-5).
Con tres de ventaja para los italianos comenzó el cuarto decisivo y los españoles desaprovecharon un ataque con un tiro al palo otro al larguero y el remate de Iván Pérez a la cara de Tempesti. La falta de puntería y otro gol de Presciutti a poco más de cuatro minutos para el final condenaron a los hombres que dirige Aguilar.