El Lunes Santo se vistió de de gala en el Campo de Gibraltar con un fervor y una emoción renovados. Miles de fieles se congregaron en sus calles para ver los pasos que desfilaron por sus calles. Y en este día, tampoco olvidar el desfile del Tercio Duque de Alba 2º de la Legión en Algeciras, que llegó a la ciudad encabezado por su jefe, Cayetano José Martínez Alonso.
El Lunes Santo despertó con toda su solemnidad en Algeciras y lo hizo minutos antes de las cuatro y media de la tarde, cuando se abrieron las puertas de la capilla de la Caridad, dando paso a la esperada estación de penitencia de Jesús Coronado de Espinas. En esta jornada, la Venerable y Muy Mariana Hermandad de Penitencia de Jesús Coronado de Espinas, María Santísima de la Salud y Virgen de Gracia salió a las calles, marcando su tercer año de historia en esta tradición tan arraigada. Aunque la capilla de la Caridad fue su punto de partida, la hermandad mantiene como sede canónica la parroquia de San García Abad, donde esperan poder realizar sus salidas procesionales en próximas ediciones.
En la salida del paso, los costaleros y capataces demostraron una habilidad excepcional, con un trabajo milimétrico que les permitió sortear cualquier inconveniente y evitar daños en paso ante la estreches de la puerta del edificio.
Este año, el conjunto escultórico del paso de misterio se ha enriquecido con una figura de un romano, realizado por el escultor José Francisco Blasco Rivero. Con una postura dinámica y una expresión solemne, destaca la indumentaria y la policromía, elaboradas con un esmero que resalta el realismo de la pieza.
Los casi cien nazarenos emprendieron el recorrido, luciendo túnicas de ruán blanca, antifaz de terciopelo burdeos y cinturones y zapatillas de esparto. La uniformidad del vestuario ha aportado un aire de dignidad al cortejo, que ha avanzado con recogimiento y devoción.
El acompañamiento musical, a cargo de la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora de Gracia de Carmona impregnó el ambiente con sus sones marciales, elevando la espiritualidad del momento. Cada nota resonó en el corazón de los asistentes y añadió un componente emocional que conmovió a todo el público.
El exorno floral del paso completó la representación con una selección de flores que cargan un profundo simbolismo. Rosas rojas, eringios azules, eucalipto, lisianthus blancos, violetas, espinas y amaranthus color vino han creado un juego de colores y texturas, que ha embellecido aún más la imagen de Coronado de Espinas, evocando las emociones que la Semana Santa despierta.
Y tras ella, a las siete de la tarde y también en Algeciras, el Cristo de La Columna y María Santísima de las Lagrimas. Con casi 400 hermanos en el cortejo, el ambiente se impregnó del aroma a incienso,preludio de la espiritualidad que caracteriza a esta jornada.
Los pasos cobraron vida, con 160 nazarenos vestidos de penitentes que han marcado el ritmo del desfile. En el paso de Misterio, 56 portadores han llevado con devoción al Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna. A su lado, 67 hermanos sostenían el palio que cubría a María Santísima de las Lágrimas. La unión de tanta entrega ha creado un espíritu de hermandad, un eco de fe que ha resonado en cada rincón de la ciudad.
El desfile de la Legión añadió un toque solemne al recorrido. Compuesto por legionarios de la Hermandad del Tercio Duque de Alba II de la Legión, que abrió el camino con disciplina y respeto, bajo el son de la banda de música. El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, quiso rendir homenaje a estos soldados, recibiendo en el Ayuntamiento a sus máximos representantes. En un gesto de reconocimiento, Landaluce entregó placas conmemorativas, un símbolo de gratitud hacia la institución militar.
Las autoridades municipales se unieron a la comitiva en su calidad de Hermano Mayor Honorario de la Cofradía, y mostró un año más su apoyo a la procesión, que contó además con la participación de la Policía Local, bajo la protección de la Virgen de las Lágrimas.