Al final de la asamblea, las esperanzas quedaron abiertas, pero se mantienen la manifestación del próximo lunes y la huelga de 24 horas convocada para el jueves.
En el salón de actos, casi lleno por trabajadores de Qualytel, los miembros del comité de empresa, acompañados por el secretario comarcal de UGT, Pedro Alemán, y el secretario local de CCOO, José Manuel Trillo, lanzaron un mensaje de unidad y solidaridad animando a la participación en las movilizaciones y explicaron las razones por las que exigen un tratamiento de Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para resolver los depidos por la marcha de la mayoría de los servicios de Orange antes de diciembre de 2009, fecha del final del contrato.
El presidente del comité de empresa, Miguel Abreu, y la representante de CCOO, Begoña López, argumentaron que con un ERE, además de asegurar un mínimo de indemnización de veinte días por año trabajado -superando los ocho que ahora ofrece la empresa-, se ganaría tiempo para negociar, puesto que su trámite no es inferior a dos meses, y se anularían automáticamente las cartas de despido. Los representantes de los trabajadores también insistieron en que otra de las exigencias a la empresa era un compromiso de contratación para los empleados que finalmente tuvieran que ser despedidos.
Negociaciones vía móvil
Mientras, Trillo y Alemán mantenían conversaciones telefónicas con la alcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, que a su vez estaba en contacto con representantes de la dirección empresarial de Qualytel.
La alcaldesa comunicó a los líderes sindicales, y éstos a la asamblea, que la empresa se comprometía a contratar a todos los despedidos a partir del día 3 de febrero en un nuevo proyecto, del que no facilitó el nombre de la empresa que contrata los servicios, a cambio de que los trabajadores renunciaran a seguir planteando el ERE como solución al conflicto.
Al conocer esta posibilidad los gritos de alegría llenaron el salón de actos, pero duraron poco, ya que los sindicalistas advirtieron de que no había nada firmado y había que seguir organizando las acciones reivindicativas.
En respuesta a la propuesta comunicada por la alcaldesa, el comité, Alemán y Trillo volvieron a contactar con la regidora para contraofertar que aceptarían la propuesta si la empresa retrasaba la fecha de los despidos como mínimo hasta el 4 de febrero, un día después del inicio del nuevo proyecto.
Sigue el conflicto
En espera de una nueva comunicación de la alcaldesa finalizó la asamblea con el apoyo decidido de los trabajadores a las medidas de presión anunciadas y con la moral bien alta al ser conscientes de que con tan sólo el anuncio de movilizaciones habían conseguido la mediación de la propia alcaldesa y que Qualytel buscara una salida al conflicto diferente al despedido por finalización de obra defendido desde el pasado día 16, fecha en que los trabajadores que atienden los servicios de la plataforma Orange recibieron la carta de despido.
Al cierre de esta edición, ni el presidente del comité de empresa ni los responsables locales de CCOO y UGT habían recibido la esperada llamada telefónica de Pilar Sánchez en respuesta a su contraoferta, por lo que el conflicto sigue y se mantienen la manifestación que el lunes parte a las doce del mediodía de la Alameda Cristina y que concluye a las puertas de Qualytel, y la huelga convocada para el próximo jueves. Previamente al paro, concretamente el próximo martes, tendrá lugar la preceptiva reunión en las oficinas jerezanas del Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) para el último intento de acuerdo.
