Recientemente, en una visita a la casa museo de Lope de Vega en Madrid, casa que habitó el insigne escritor, situada en la calle Miguel de Cervantes, precisamente porque en ella se encuentra también la casa de padre creador del mundialmente conocido D. Quijote de la Mancha, se nos contó la anécdota de que en aquellos tiempos las casas de dos pisos en la villa y corte de Madrid debían albergar, dando alojamiento y comida gratuitos, a algún cortesano de palacio. Este podemos decir “impuesto indirecto”, fue abolido en el siglo XIX, pero de alguna forma sigue vigente y además rabiosamente actual.
Una de las personas que en ese momento realizaban la visita guiada (muy recomendable por cierto) comentó que había tenido varios años viviendo bajo su techo a nada más y nada manos que al SR. Rato. Eso sí sin saberlo ambos. Ni él mismo, ni Rato, se habían percatado que el esfuerzo recaudatorio que el gobierno de la nación está realizando y agravando por momentos, parten de la “obligación” de toda familia española de albergar de “gorra” a cama y mantel, como se decía antaño, a algún alto mandatario (o magnatario) del gobierno o del reino. Ya que cada vez que hacienda pasa la gorra, equivale a varios años de invitación forzada por ley.
Deja mucho que pensar como haya cambiado la vida desde el inicio del siglo XVII, pero no tanto como parece. Seguimos albergando en nuestros hogares a “cantamañanas” cortesanos que a fuerza de acercarse al poder adquieren la condición de invitados perpetuos, en tu casa o en la mía (qué más da), y ello en la más absoluta ignorancia de los anfitriones que de nada de esta invitación forzada perciben.
Sirvió esta visita guiada a la casa museo del Fenix de las letras para valorar en alta estima la vida y obra de este prolífico autor, y de la compañía que “forzadamente” tuvo que soportar del Capitán Contreras. Y al mismo tiempo desear que si la corona nos sigue obligando a dar cama y mantel a algún personaje de postín, que este sea similar al mencionado Contreras ya que si bien convivió con D. Lope de Vega gratis, aportó elementos literarios de valor a su paso por la vida del autor y su obra. Por ello es exigible a estos prebostes, que alimentamos y cobijamos entre todas las familias, que al menos aporten algo aunque sea al mundo de la literatura.
Fdo. Rafael Fenoy Rico Comunicación CGT
