El presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, considera que, dado que las comunidades autónomas no tienen los ingresos necesarios y deben reducir el déficit público y la deuda, lo responsable sería pactar con el Gobierno central qué gastos y qué prioridades deben tener.
Núñez Feijóo hace esta consideración en una entrevista con Efe al ser preguntado por el modelo de financiación autonómica y su posible reforma, algo que -recuerda- siempre se ha hecho en momentos de crecimiento económico, "y en este momento la economía no está creciendo lo suficiente".
"Es muy difícil que uno dé lo que no tiene", plantea el presidente gallego, quien sostiene que, a falta de ingresos, procede ponerse de acuerdo en los gastos y argumenta: "Si no podemos pagar todo, si tenemos que bajar el déficit público, si tenemos que bajar la deuda y tenemos que atender los servicios públicos esenciales, pues pactemos los gastos".
Un mensaje que encaja con el aviso que todas las comunidades autónomas han dado al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas en su análisis del actual modelo de financiación que, según advierten, no les da recursos suficientes para mantener la Sanidad, la Educación y los servicios sociales.
Feijóo sostiene que las comunidades autónomas han hecho un "enorme esfuerzo" y están "al límite" en su capacidad de ajuste del gasto tras seis años consecutivos de reducción de ingresos, por lo que ahora es un planteamiento "muy responsable" decir al Gobierno que hay que ponerse de acuerdo en las obligaciones y los gastos.
"Es decir, ¿son razonables o no determinados gastos que tenemos en determinados servicios públicos? Esto ya los presidentes autonómicos no podemos decidirlo, lo tenemos que decidir todos los presidentes autonómicos y el Gobierno de España", plantea.
Para ello, una Conferencia de Presidentes -cita que han reclamado esta semana Andalucía, Canarias y Asturias- puede ser un instrumento "útil", siempre y cuando se prepare bien, tenga contenido y los dirigentes se comprometan "con lealtad".
Núñez Feijóo critica además que el actual modelo fue "impuesto bilateralmente entre el Gobierno central y la Generalitat de Cataluña", que ahora es la primera que quiere una nueva financiación.
El presidente gallego se pronuncia también sobre la consulta que pretende convocar la Generalitat, y que, en su opinión, no se celebrará, porque es ilegal, y porque, de hacerlo, el presidente catalán, Artur Mas, incurriría en un "clarísimo abuso de poder".
Feijóo subraya que un presidente que es el representante ordinario del Estado en una comunidad y que ha prometido cumplir la Constitución no puede "atentar" contra ese Estado.
"De la misma forma que nadie discutía que el plan Ibarretxe era un plan abocado al fracaso, pues el plan Mas es el plan Ibarretxe unos años más tarde", asevera.
Valora el mandatario gallego la respuesta que el presidente del Gobierno ha dado al reto de Mas, "primero con sosiego y segundo con firmeza".
"Ha dicho que mientras él sea presidente del Gobierno no va a propiciar nada que desuna, divida o debilite a los españoles y esto es muy importante, recalca Feijóo, quien asume que la consulta no se va a celebrar "no porque el presidente del Gobierno tenga margen, sino porque no lo tiene".
Es firme defensor de "plantear una lucha ideológica" en defensa del Estado de las Autonomías, que ha sido "un éxito y no un fracaso", lo que ha motivado que quienes "nunca están conformes" quieran "algo distinto".
Pero, en su opinión, sería un "grave error" caer "en la tentación de hacer un planteamiento recentralizador del Estado", pues supondría dar la razón a los secesionistas.