Los siniestros sufridos por bares, cafeterías y restaurantes costaron a las aseguradoras cerca de 145 millones de euros, según se refleja en la última edición de la Memoria Social del Seguro elaborada por Unespa, que destaca además que estos locales sufren seis de cada diez siniestros ocurridos en comercios.
Los comercios españoles sufren cerca de 384.000 siniestros al año, desde goteras hasta incendios, pasando por robos, averías de maquinaria o roturas de cristales, lo que se traduce en el desembolso por parte de las aseguradoras de 315 millones de euros en indemnizaciones.
Los negocios más proclives a asegurarse dentro del sector servicios son los bares, cafeterías y restaurantes, seguidos de las boutiques de moda y las tiendas de comestibles.
Según la Memoria, los establecimientos de hostelería presentaron unos 230.000 partes en 2012, que costaron a las aseguradoras cerca de 145 millones de euros.
Las tiendas de ropa, por su parte, recurrieron al seguro en más de 30.000 ocasiones, que se indemnizaron con 38 millones de euros.
Los 170.000 supermercados y establecimientos de comestibles asegurados en el país sufrieron 48.000 siniestros y percibieron por ello 33 millones de euros.
Otros locales como estancos, tiendas de sonido o peleterías no sufren un gran número de siniestros, por lo que los costes totales que generan al seguro no son particularmente elevados si se comparan con los de los negocios de hostelería, por ejemplo.
Sin embargo, cuando uno de estos comercios presenta un parte, este suele ser de mayor gravedad.
En 2012, los 20.000 estancos asegurados padecieron 10.320 siniestros por los que ingresaron 38 millones de euros, lo que representa un coste unitario por incidente de 3.650 euros.
En las peleterías la indemnización media ascendió a 3.134 euros, mientras que en las tiendas de sonido fue de 3.075 euros y en bares y restaurantes, donde se produce el mayor número de siniestros al año, el pago por percance asciende a 628 euros.
Los problemas más frecuentes en los comercios son los daños por agua, con 100.522 partes, una cifra que dobla los percances por robo (55.863) y cuadriplica los de incendios (23.596).