“Estoy convencido de que esta situación es injusta después de seis años en el Xerez, cinco en Segunda y uno en Primera División. Y con una deuda totalmente asumible para un equipo de Primera e incluso de Segunda. Y después también de mucho trabajo. Sé que Joaquín Morales está sentenciado y si lo que puedo hacer por el bien del Xerez es irme a mi casa y pasar a la historia, pues eso intentaré hacer”, confesó el máximo accionista de la entidad.
Ahora, para que se produzca esa marcha definitiva, habrá que esperar, como siempre, a que llegue algún comprador que quiera hacerse con el Xerez. En este sentido, Morales indicaba que “vamos a ver si viene alguien que tenga ganas de fútbol. Nosotros hemos dado un paso importante con la Ley Concusral, que la tenía que hacer yo o yo. Prometí que el equipo iba a estar en Primera y gracias a Dios está ahí. También prometimos que el club iba a estar saneado y el primer paso es la Ley Concursal, que es un hecho que garantiza los pagos de los futbolistas y de los empleados para consolidarnos en Primera”.
De las firmas que recibió en su contra, Morales declaró que “he tomado muy buena nota de la entrega de las firmas. A mí no hace falta que me entreguen diez mil firmas. Yo con que me chille una persona, basta. No sirvo para este tipo de cosas, pero el mundo del fútbol es así”. A este respecto también resaltó que “cuando me marche lo haré por derecho y no como un delinquente. Lo que tengo claro es que con diez mil aficionados pidiendo mi marcha no puedo estar tranquilo. Estoy convencido de que no pueden tener todos ellos el pie cambiado”.
Las firmas también pedían la dimisión de los consejeros, pero por ahora nadie piensa marcharse. Es más, Morales dijo estar “muy contento” con el trabajo de Antonio Fernández Monterrubio, uno de los blancos de las críticas de la afición xerecista. Además, el empresario nazareno comentó que “Monterrubio seguirá hasta que esté Joaquín Morales”. Pero no sólo seguirá su mano derecha. También el resto: “Nzadie me ha presentado la dimisión. Aquí el día que se vaya alguien nos iremos todos. Estoy convencido de que se ha formado una bola ilógica que no tiene fin. Tenemos al club en Primera y con una solución buenísima -por la Ley Concursal- que deberíamos haber hecho antes. Los mismos auditores nos dicen que cuando hagamos la Ley Concursal va a ser de categoría ya que no la hemos hecho como otros clubes por impagos o para salvar la categoría. Aquí todo el mundo está al día”.
