El alcalde, Bruno García, necesitó mucho aplomo, mano izquierda y bolígrafo y libreta para salir airoso de la rueda de prensa que convocó para informar de la finalización de las obras de urbanización en las calles Santo Domingo de la Calzada, Rafael Picardo O’Leary y Eduardo Benot de la barriada de La Paz. Mientras atendía a los medios de comunicación este miércoles, junto con la delegada del Gobierno, Mercedes Colombo, y la responsable territorial de Vivienda, Carmen Sánchez, dado que la Junta de Andalucía ha financiado 1,2 millones del proyecto con cargo a los fondos ITI (y el Ayuntamiento ha aportado otros 200.000 euros), el primer edil fue increpado por vecinos de los bloques, mientras que otros lo abordaron al término de su intervención para denunciar lo que consideran una auténtica chapuza.
“La obra la han ejecutado albañiles en prácticas”, ironizaba una mujer, mientras que un hombre le recriminaba la falta de bancos “para las 140 familias que hay aquí” y “que las adelfas de los parterres son venenosas y hay menos árboles”. Otro llegó a afearle que “no haya hecho nada por esto”, a lo que Bruno García replicó que, una vez empuñó el bastón de mando, desatascó las obras paralizadas.
A continuación, invitó a los presentes a que les detallaran y mostraran las incidencias, como la inundación de los nuevos pasos de peatones y bolsas de agua porque “los husillos están más altos”.
El primer edil se comprometió a trasladar las reclamaciones a la empresa, pero también valoró que se hayan incorporado dos nuevos pasos de peatones y más mobiliario urbano, se hayan sustituido cuatro escaleras de acceso a los patios de Santo Domingo de la Calzada, se haya renovado de manera integral el sistema de recogida de aguas pluviales, se ha creado un nuevo sistema de drenaje y una nueva red de alumbrado público, entre otras actuaciones.
“Es una obra importante y la barriada de La Paz lo merecía”, destacaba, por su parte, Mercedes Colombo.