Los trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de limpieza en Cádiz, Sufi-Cointer, iniciaban a las 23,30 horas de este domingo una huelga indefinida de basura tras la falta de acuerdo con la dirección de la empresa en cuanto a la subida de salarios estipulada en el convenio laboral. A pesar de los servicios mínimos, los contenedores han amanecido repletos de basura.
El comité de empresa advertía a Europa Press que llevarían a cabo la protesta salvo que recibieran, 'in extremis', una llamada de la empresa para negociar una solución, lo cual no ha ocurrido finalmente.
Los servicios mínimos contemplan que estén en activo cuatro caminos de recogida de basura y uno de enseres, lo que supone "aproximadamente un tercio de los que funcionan normalmente".
Según ha explicado el presidente del comité de empresa, Juan José Montesinos, la huelga viene motivada por el "incumplimiento del convenio firmado en 2009 con la empresa, que estipulaba una subida progresiva de los salarios hasta llegar a los dos puntos sobre el IPC en abril", la cual "no se ha producido".
Así, el representante de los trabajadores ha criticado que la empresa "no haya hecho nada en dos meses y se siente un día antes de la huelga" --en referencia a un Sercla celebrado el jueves y una reunión el viernes-- para tratar de disuadirlos de realizar la protesta, al tiempo que han recibido el aviso de que "si siguen con esa postura habrá un expediente de regulación de empleo (ERE)".
Por su parte, desde el Ayuntamiento gaditano ya han mostrado varias veces su "preocupación" por el daño que esta protesta pueda hacer a la imagen de la ciudad en una semana en la que se celebra la Gran Regata del Bicentenario, que comienza el próximo miércoles 25 de julio. Así, la alcaldesa, Teófila Martínez (PP), planteó pedir a los ciudadanos "que nos hagan el favor de no sacar la basura para que la ciudad no dé el aspecto que no debe dar".
