Un mazado tras otro. Si 2020 fue un año de gran tensión, donde las trabajadoras y los trabajadores del comercio minorista de alimentación en general tuvieron que enfrentarse diariamente al Covid al tratarse de un servicio esencial, la plantilla de Supersol en la provincia de Cádiz tuvo que soportar otro golpe, el anuncio de la venta de la empresa a la multinacional francesa Carrefour, que llenó de incertidumbre al personal de la empresa.
La razón es el anuncio de la empresa de supermercados que opera bajo la enseña de Superol y Cash Diplo, del despido de un total de 252 personas de su plantilla a nivel nacional, de los cuales 70 son trabajadoras y trabajadores de la provincia de Cádiz, y que afecta a la plataforma logística de Puerto Real, oficinas y a los centros de Cash Diplo.
Este nuevo ERE se suma al realizado en diciembre de 2019, y que llevó al despido de 294 personas de tiendas a nivel nacional, y provocó el cierre de 18 tiendas y 12 pescaderías. Para UGT "este ERE no sólo no está justificado, ya que parece la consecuencia de la urgencia del grupo lituano Maxima por deshacerse de la empresa española y que ha provocado su venta a Carrefour por 78 millones de euros, sino que además es injusta con una plantilla sacrificada al extremo durante la dura pandemia del Covid".
Por ello, desde el sindicato "rechazamos dicho expediente de regulación de empleo, y exigimos a la dirección de la empresa medidas no traumáticas, como la reubicación del personal en las tiendas de Supersol de Cádiz, y en caso extremo mediante prejubilaciones, de forma que no se vea comprometida la supervivencia de decenas de familias de nuestra provincia".