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Acento andaluz

Como un castillo de naipes

Pasó lo que tenía que pasar. La realidad nos vuelve a demostrar que los actos de fe tienen siempre fecha de caducidad y la verdad, más temprano que tarde...

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Pasó lo que tenía que pasar. La realidad nos vuelve a demostrar que los actos de fe tienen siempre fecha de caducidad y la verdad, más temprano que tarde, emerge entre el ruido, la desinformación o la propaganda. Así ha ocurrido con uno de los dogmas económicos y fiscales más repetidos por la Junta de Andalucía: bajando los impuestos recauda más. Una ecuación que discuten numerosos economistas y que cuestionó el ex consejero de Economía Rogelio Velasco en el gobierno de coalición PP-Cs cuando afirmó que la Junta compensaría la merma por las rebajas fiscales con una mayor recaudación gracias al crecimiento de la economía. Afirmaciones que no valieron para que el Gobierno autonómico modulara su mensaje de que ingresa más cuanto más reduce la presión fiscal. Ni siquiera cuando, en noviembre del año pasado, el Observatorio Económico de Andalucía rechazó tajantemente este mantra del Gobierno andaluz. Con todo, ahora habrá que estar atentos a la reacción de la Junta ante unos datos incontestables aportados por las comunidades autónomas y visados por el Ministerio de Hacienda: de 2019 a 2022, todos los territorios del país aumentaron su recaudación, pero el incremento de Andalucía fue 5,2 puntos menor que la media nacional. Es decir, la mayoría de comunidades que no bajaron impuestos recaudaron más que Andalucía que los bajó. Por tanto, las 6 rebajas fiscales del Gobierno andaluz no nos han situado, ni de lejos, en el liderazgo de la recaudación y si ingresamos más fue gracias al crecimiento económico, no a que haya desaparecido el supuesto infierno fiscal en el que nos abrasábamos, según denunciaba el PP.

Es el primer dogma del ejecutivo popular que cae en saco roto de una manera tan rotunda, pero hay otros que se tambalean ante la inconsistencia de los argumentos que esgrime la Junta, como que Andalucía crece más que el resto de España cuando estamos retrocediendo en convergencia (crecimos tres décimas por debajo de la media nacional en 2022 y es la primera vez de toda la serie histórica que somos la última comunidad en el ranking de PIB per capita) o que seamos la locomotora de la creación de empleo en España cuando unos meses ocurre eso en el paro registrado y en la Encuesta de Población Activa, pero en otras ocasiones todo lo contrario. También está en duda que el PP sea sinónimo de eficacia en la gestión después de los bajísimos porcentajes de ejecución de los fondos europeos y de sus propias inversiones presupuestarias. Así las cosas, bien haría el ejecutivo de Moreno en olvidarse de seguir difundiendo un marco mental en la ciudadanía de que Andalucía va como un tiro y precisamente poner toda la carne en el asador para que realmente vayamos como un tiro. Ojalá así sea y no tengamos que ver caer otro castillo de naipes.

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