El artista compartió con los presentes la evolución que ha sufrido su obra pictórica desde sus inicios en la Escuela de Artes y Oficios y su paso por la Escuela Superior de Bellas Artes y hasta el día de hoy, reconociendo que fue a partir de 1975 cuando su 'marca' quedó estampada en sus obras. "No puedo negar que con mi obra me muestro como un pintor claro que quiere que su pintura contribuya a un mundo de paz, espiritual y en que los ciudadanos presten más atención a la trascendencia de las cosas", valoró Manuel Kayser.
Durante su intervención, el artista mostró su postura más reivindicativa al recordar a los artistas jienenses que "han trabajado muy duro" y que no han sido tan reconocidos o sus obras han sido trabajo de investigación para otros. "Cuando en Jaén no había una tendencia pictórica señalada, en los años sesenta se definieron pintores como Juan Hidalgo y José Cortés como más vanguardistas y otros como Eduardo Cuesta, Francisco Baños y Alfonso Parras, más clásicos, que también merecen ser reconocidos", dijo el artista.
Finalmente, Manuel Kayser profundizó sobre las series de su obra: ‘Otoño’, ‘Campiña’, o ‘De lo espiritual al arte’, entre otras.