Se trata de una especie animal poco valorada en la gastronomía gaditana, pero sí que se usa en algunos platos del Levante español y, sobre todo, se aprecia mucho en algunos países asiáticos, donde algunas de las entrañas se utilizan en comidas como el sushi, y también se comen, una vez desecados y vueltos a hidratar, en sopas, típicas especialmente en China, en donde el trepang es considerado un caro manjar con fuertes poderes afrodisíacos.
Por eso no es de extrañar que hayan sido de nacionalidad china los ciudadanos que fueron sorprendidos el pasado lunes por la Policía Local mientras mariscaban sin licencia pepinos de mar en la zona de La Caleta, concretamente en las rocas cercanas al Castillo de San Sebastián.
Restaurante
En el momento de la detención, los tres ciudadanos chinos portaban cincuenta kilos de este producto, reconociendo que los usaban para comer y para vender en el restaurante chino que poseen en Chiclana.
Los agentes los trasladaron hasta la Comisaría de Cádiz para proceder a su identificación. Una vez allí, Y.Q., W.Q. y S.Z. fueron denunciados por marisqueo sin licencia, siéndole retirada la gran cantidad de ejemplares de carajo de mar que habían capturado.
A partir de ahí, la Policía Local abrió las diligencias pertinentes por un posible delito contra la flora y la fauna, quedando los tres ciudadanos a la espera de que el juzgado los cite para declarar e imponerles la sanción correspondiente. Según afirman fuentes de la Policía, los agentes trataron de ponerse en contacto con la Consejería de Agricultura y Pesca para ponerles al corriente del caso, pero no consiguieron hacerlo.
Se da la circunstancia de que el carajo de mar es una especie esquilmada en la zona de Cádiz, donde quedan pocos ejemplares, aunque no ha sido declarada especie protegida por las autoridades competentes.
Fuentes policiales aseguran que aumentarán la vigilancia para impedir que se vuelva a producir este tipo de marisqueo en la playa, procediendo a denunciar a las personas que porten cantidades elevadas de estas especies y devolviendo los ejemplares capturados al mar.
Protagonista en las tablas del Falla
El carajo de mar es una referencia recurrente en el habla gaditana. Su forma y nombre sirven para acordarse de él, especialmente de manera irónica. El Carnaval es la mejor prueba de ello. Por ejemplo, la chirigota de los famosos se acordó de los carajos de La Caleta en más de una ocasión.
