El nuevo comedor social de Óscar Marín, el llamado carnicero solidario de La Línea, ha arrancado con éxito. Alrededor de un centenar de personas, según el propio Marín, estrenaron las instalaciones el pasado sábado por la tarde, en lo que resulta un buen comienzo, a pesar de que por ahora no alcanza las cifras de sus anteriores experiencias al aire libre cerca del hospital viejo. "Es lo normal, mientras la gente se va enterando", comenta Marín a VIVA CAMPO DE GIBRALTAR.
La nueva cocina solidaria de Óscar Marín es un comedor interior instalado en la propia carnicería del linense solidario, en la calle Padre Pandelo del municipio linense. Marín reconocía, días atrás, que ha sido el resultado de varios años ahorrando dinero para dicha reforma, y que todavía le faltan algunos retoques, lo que no evita que pueda estar ya en funcionamiento. Todo, asegura, para "seguir haciendo la obra de Dios" de ayudar a los más necesitados.
Hay que recordar que Marín ya llevaba años llevando a cabo esta labor de comedor social cerca del viejo hospital, pero que ahora ha decidido hacer este cambio "para poder prestar el servicio mejor y más resguardados".
Óscar Marín llevaba una vida completamente normal y corriente hasta que un día sintió la llamada de Dios a ayudar a los demás. Desde entonces, ofrece semanalmente un plato de comida a cientos de personas necesitadas de La Línea y, excepcionalmente, en fechas señaladas como la Navidad. Además, ha organizado estos dos últimos años una iniciativa para apadrinar a niños en el día de Reyes Magos, de modo que personas solidarias puedan aportar os regalos que los pequeños demandan, los cuales son entregados a los padres y cuidadores en la previa de Reyes Magos. Gracias a esta iniciativa, este año de 400 a 500 menores en situación socialmente complicada han recibido sus presentes.
