El Carlos Piña de Los Barrios ha vivido muchos partidos de categorías y competiciones muy variopintas, pero este martes se ha vestido de estadio grande para recibir a la Selección Española sub 17 y a sus homólogos italianos. Aunque el resultado fue de tablas (3-3), la afición salió ganando por el gran espectáculo vivido.

El lleno se avecinaba desde hace varios días, ya que las entradas para el primero de los dos amistosos que disputarán ambos equipos volaron al poco de ponerse a la venta. Las dos tribunas, las barandillas de los fondos e, incluso, la loma que preside el campo de San Rafael desde una de sus esquinas. Todos los puntos posibles estaban llenos de aficionados deseosos de ver a las futuras estrellas del fútbol español.

El partido estuvo más que a la altura de la expectativa generada, con un equipo español que incluía a jugadores que han debutado en competición oficial como el extremo Otorbi, del Valencia CF. En Italia la estrella era Francesco Camarda, de solo 15 años y que se convirtió en noviembre en el futbolista más joven en un partido de la historia de la liga italiana.

En cuanto a goles, el partido estuvo mucho más que servido. De hecho, en el minuto dos ya iba ganando el combinado español. Oyono se internó por la izquierda, se la pasó a Navarro que la centró a media altura y Yáñez, que entraba desde la banda contraria, la mandó a las redes desde el segundo palo.

Con el ambiente por las nubes, España reaccionó bien y Otorbi destacó por su actividad en la banda. Después de que el guardameta Simón salvase un par de ocasiones claras de Liberali y Cappelletti, apenas pasado el primer cuarto de hora de juego llegó el segundo de los españoles. Oyono recibió un pase filtrado muy bueno y, sin nervios frente al portero dentro del área, puso el 2-0.

A la media hora, de nuevo el punta del Villarreal marcó para poner el 3-0. Otorbi recibió en el área, amagó y disparó y el rechace del portero lo enganchó Oyono para extender la ventaja de la Roja.

Antes del descanso recortó distancias Italia, que merecía algún gol por las ocasiones que venía generando. Mosconi marcó en el 38’ tras una jugada un poco embarullada en el área protagonizada por él mismo.

La segunda parte cambió las tornas e Italia tomó más la batuta a medida que entraban los cambios. De hecho, entró al campo José Antonio Reyes, hijo del ex futbolista de Sevilla FC, Arsenal o Real Madrid, que generó gran expectación entre los más jóvenes pese a partir desde el banquillo.

El recién entrado Atzeni marcó un gran gol desde 20 metros tras un disparo raso muy ajustado a la cepa del poste que Simón no consiguió alcanzar. Apenas dos minutos después, un penalti sobre Coletta, lo lanzó Camarda, aunque el portero español lo detuvo y el rechace le cayó a Sala, que no perdonó el empate.

Cualquier equipo pudo llevarse la victoria en el tramo final, con ocasiones para uno y otro, aunque el resultado no se movió como sí hicieron los cientos de chiquillos (y no tan chiquillos) que se lanzaron corriendo al césped para hacerse fotos con los jóvenes talentos de España. Quién sabe si de aquí a algunos años haya estampas de este día de fútbol en Los Barrios que pasarán a los anales de la historia cuando alguno despunte en un club de altura.

Lo que sí es seguro es que la afición campogibraltareña que se dio cita en el San Rafael sí que ganó con un gran partido que se repetirá este jueves por la mañana, donde los niños de los colegios de la ciudad tomarán el protagonismo llenando las gradas.